Presentación

La foto que puede robarle su huella digital

Científicos japoneses demuestran que es posible «copiar» la huella dactilar cuando posamos haciendo el símbolo de la victoria

Isao Echizen, autor del estudio, muestra una solución ante posibles robos
Isao Echizen, autor del estudio, muestra una solución ante posibles roboslarazon

Científicos japoneses demuestran que es posible «copiar» la huella dactilar cuando posamos haciendo el símbolo de la victoria

De la «v» de victoria a la «h» de «hackeo» puede haber menos distancia de las 15 letras que dicta el abecedario. Los ciberdelincuentes tienen a mano una nueva puerta en la que «colarse» con vistas a robarnos nuestra identidad. Y la llave puede estar en algo, a priori tan inocente, como un «selfie».

El Instituto Nacional de Informática de Japón (NII) ha demostrado que es posible «copiar» las huellas dactilares que mostramos en aquellas fotos donde, todo ufanos, exhibimos las yemas de los dedos índice y corazón haciendo el símbolo de la victoria. Basta con que la imagen no esté tomada a más de tres metros de distancia, pues la altísima resolución que ofrecen las cámaras de los «smartphones» actuales ayudaría a su recreación. Además, su difusión en las redes –hoy, muchas de las fotografías que tomamos a través del móvil se «suben» de forma casi instantánea a lugares como Instagram– provoca que estén al alcance de cualquiera. Así, no sería ni siquiera necesario acceder al dispositivo de la víctima con vistas a obtener tan valiosa información.

Y es que, en este caso, no hablamos de «hackear» los sensores de huellas de los teléfonos móviles –un sistema, por otro lado, al que entendidos en ciberseguridad ya han encontrado vulnerabilidades–, sino de, literalmente, «fotocopiar» esta seña de identidad tan personal. Pero entonces, ¿es posible reproducir fielmente una huella digital a partir de una simple foto? La respuesta es que sí. Expertos en seguridad informática han demostrado que, con paciencia y habilidad, se puede imprimir la imagen de una huella en una tarjeta de plástico cubierta de grafito y resina. Así lo hicieron en el congreso de ciberseguridad Chaos Computer Club en Berlín, en el que los «hackers» lograron engañar al Touch ID, el sistema de reconocimiento dactilar del iPhone 5S. Es más, lograron también una recreación de las huellas de Ursula von der Leyen, ministra de Defensa alemana, simplemente a través de imágenes que habían aparecido de ella en la prensa.

«Los datos de huellas digitales pueden ser recreados si éstas están enfocadas en la imagen con una iluminación intensa», afirma Isao Echizen, profesor del NII. Este sistema no sólo podría burlar el sistema de reconocimiento de los dispositivos móviles; también podría utilizarse en todos aquellos sistemas biométricos de reconocimiento que requieran una huella dactilar.

Hay que tener en cuenta que las yemas de los dedos o los iris de los ojos no son una simple contraseña que puede cambiarse con facilidad; se trata de una información cuya alta seguridad –al menos hasta ahora– estaba precisamente en su condición de intransferible. Hoy, el «mercado negro» de internet es un foco de compra y ventas de DNI, pasaportes y otros documentos robados o extraviados que facilitan el robo de identidad. ¿A partir de ahora veremos cómo se mercadea también con la información que oculta el reverso de nuestras manos?

Así se puede evitar

Incluso si los «hackers» intentaran llevar a cabo tan laborioso delito, el equipo del NII ha comenzado a desarrollar una sustancia a base de óxido de titanio, creando una película transparente que cubriría los dedos haciendo las huellas «irreconocibles». Esperan tener a punto esta tecnología en dos años.