NASA

Última tecnología para pisar suelo marciano

Un proyecto de la UPV, seleccionado como finalista del International Space Apps Challenge, el concurso de aplicaciones para el espacio de la NASA

Una de las investigadoras de la UPV, con el prototipo de traje para viajar a Marte
Una de las investigadoras de la UPV, con el prototipo de traje para viajar a Martelarazon

Piense en el traje ideal para pisar el suelo de Marte, dotado de la última tecnología y con todos los ingredientes para protagonizar la última película de astronautas salida de la factoría de Hollywood. Debería tener, quizás, una mochila propulsora. Y uno de esos casos con pantalla incorporada en la que se van mostrando todos los datos del suelo marciano mientras el «intruso» escruta el horizonte. Y, por qué no, un exoesqueleto último modelo que ayude al astronauta a sobrellevar la pesada carga.

Todo eso, y algo más, lo lleva incorporado el proyecto desarrollado por alumnos, titulados y profesores de la Universitat Politècnica de València (UPV), que ha sido seleccionado como finalista del International Space Apps Challenge, el concurso de aplicaciones para el espacio de la NASA.

El prototipo se llama Mars UPV, e incluye un exoesqueleto que haga de «segundo cuerpo» para soportar mejor el peso, una mochila propulsora y un display integrado en el casco que proporciona información al instante sobre el entorno, y que funciona como un casco de realidad aumentada (HUD).

El proyecto ha sido elegido por el jurado como Mejor Uso de Hardware, junto con otras cuatro propuestas de Inglaterra, Francia, Bulgaria y Argentina, según informa la propia Universidad valenciana. En total, se presentaron 1.286 equipos (cerca de 15.000 participantes de todo el mundo) que propusieron soluciones innovadoras para los retos planteados por la NASA. De todos ellos, solo 5 equipos por cada categoría han pasado a la ronda final.

Mars UPV, un prototipo revolucionario

El proyecto Mars UPV consiste en un exoesqueleto inteligente que refuerza los movimientos de los astronautas desde el impulso del nervio y una mochila propulsora cuya característica principal radica en el uso como combustible de metano líquido y oxígeno, sintetizables in situ en el ambiente marciano. Todo ello se completa con un display integrado en el casco, que interactúa con el entorno gracias a un software específico y muestra información de interés sobre el planeta y las posibles señales de vida.

En su construcción, ha intervenido activamente hasta casi una veintena de miembros de la UPV: 15 son alumnos de grado y posgrado y titulados (integrantes todos ellos de la comunidad Makers UPV) y 3 son investigadores del Instituto Universitario CMT-Motores Térmicos. Luis Miguel García-Cuevas, profesor del Grado en Ingeniería Aeroespacial y miembro del Instituto CMT, explica la idea: «Hemos presentado un sistema de transporte personal para Marte que utiliza los recursos naturales que se pueden encontrar en el planeta rojo. El jetpack se compone de una mochila con depósitos de combustible y oxidante, y unas toberas propulsivas que permiten desplazarse de un lado a otro de la superficie de un planeta.»

«Fundamentalmente, hemos trabajado en el análisis de la misión, el desarrollo teórico, el diseño de la mochila, la obtención de recursos en Marte, las imágenes 3D de todas las piezas, y el sistema de realidad aumentada que utiliza el astronauta para obtener información del terreno», añade García-Cuevas.

Entrenamiento de astronautas

Pese al éxito conseguido, aún queda camino por recorrer. «Hemos conseguido un demostrador que puede ser utilizado para el entrenamiento de astronautas. Ahora mismo no sirve para volar pero sí es útil para familiarizarse con el panel de control y demás herramientas. El prototipo que presentamos lleva detrás un estudio teórico y técnico importante que asegura que el equipamiento es viable», explica Germán Torres, ingeniero aeronáutico y coordinador del proyecto

En cuanto a la decisión del jurado, la NASA hará público el nombre de los ganadores previsiblemente esta semana. El premio consiste en una visita a Cabo Cañaveral, para visitar las instalaciones de la NASA, mantener encuentros con astronautas e ingenieros, y presenciar en directo el despegue de una misión.