Épico

Hace 22 años de este momento histórico de la televisión: “Maribel, te llamo para decirte que voy a llevarme 50 milloncetes”

Carlos Sobera, presentador de “¿Quién quiere ser millonario?” no salía de su asombro

Carlos Sobera no salía de su asombro
Carlos Sobera no salía de su asombroMediasetTelecinco

Corría el año 2000 y en España había un boom de concursos televisivos entre los que destacaba “¿Quién quiere ser millonario?” presentado por Carlos Sobera en Telecinco. Entonces el premio que uno podía llevarse si llegaba hasta el final era de 50 millones de pesetas (300.000 euros) y todavía nadie lo había conseguido. Hasta que llegó Enrique Chicote Blanco, de Barcelona, que utilizó uno de sus comodines para una “sobrada” que se convirtió en historia de la televisión.

La dinámica del programa dictaba que el concursante tenía que contestar correctamente a 15 preguntas de cultura general con cuatro posibles respuestas. Para ayudarse en el trayecto, cada contendiente tenía tres comodines para utilizar a conveniencia: el del 50%, que reducía a dos las posibles respuestas correctas; preguntarle al público en plató, y el llamado “comodín de la llamada” con el que se podía obtener un telefonazo con las personas de confianza designadas para tal efecto y consultarles la duda.

Todos los concursantes que pasaron por el espacio presentado magistralmente por Carlos Sobera acababan siendo eliminados por fallar alguna cuestión o por retirarse antes de llegar al premio máximo. Pero el barcelonés Enrique Chicote iba a por todas. Llegado el momento de la duodécima pregunta, el concursante se enfrentaba a la pregunta: “¿De qué fruta se obtiene la copra?”. Casi seguro de la respuesta Chicote quiso asegurar y primero pidió el comodín del 50%, con lo que las respuestas quedaron reducidas a Cereza o Coco.

Entonces decidió solicitarle a Sobera el comodín de la llamada para ponerse en contacto con su mujer, Maribel. El presentador, con su habitual tendencia a la pausa dramática cogió el teléfono y marcó: “Última pregunta por valor de 50 millones de pesetas aquí en ‘Quién quiere ser millonario’, Maribel”, le dijo Sobera. “Ya ha utilizado un comodín y tiene que elegir entre dos respuestas para ganar 50 millones de pesetas”, le insistió a la mujer, que sólo sabía responder “ya, ya”, ante la incredulidad del veterano presentador que levantaba la ceja.

Chicote cogió el teléfono de manos de Sobera y habló:“Maribel, te llamaba para decirte que me voy a llevar 50 kilos”. Su esposa no entendía nada, pensando en que su marido quería consultarle las respuestas posibles. “¿Pero qué quieres decir, que ya has ganado?, decía ella desconcertada. “No, es simplemente una llamada informativa. Todavía no he ganado, tengo que acertar la pregunta pero me la sé”, afirmó, lo que supuso los aplausos y vítores del público en plató.

Y la respuesta era Coco, efectivamente, y se llevó los 50 millones de pesetas por su conocimiento y seguridad, pero la manera de hacerlo se ha convertido ya en historia de la televisión.

Un regreso fallido

El 5 de febrero de 2020, los espectadores volvieron a ver a Enrique Chicote, y volvía a “¿Quién quiere ser millonario?” esta vez en Antena 3. Se trataba de un programa especial con grandes concursantes y el barcelonés regresaba 20 años después de haber ganado 50 millones.

Pero la suerte no estaba de su lado en esta ocasión y en la sufrió cuando solo llevaba cinco preguntas para asegurarse 1.500 euros. Tras una pregunta titulada “¿Qué animal tiene los testículos más grandes en relación a su masa corporal?” y acertarla utilizando el comodín del público (”Saltamontes costero”) llegó hasta la novena pregunta y se aseguró de llevarse 15.000 euros. Pero la décima pregunta acabó con él y tuvo que marcharse sin utilizar el comodín de la llamada que tan bien le había funcionado 20 años antes.