Renacimiento
"FoQ. La Nueva Generación” no era un experimento. Era una apuesta clara
El spin-off de "Física o Química" se asegura una segunda temporada tras arrasar entre los menores de 30 en atresplayer, superando todas las previsiones de la plataforma, para luego aterrizar en Antena 3
Cuando atresplayer recuperó la marca "Física o Química", el riesgo era evidente. Resucitar un fenómeno televisivo con más nostalgia que vigencia podía haberse quedado en ejercicio de marketing o en una jugada sin recorrido. Pero “FoQ. La Nueva Generación” no solo ha sorteado ese peligro, sino que ha conseguido algo menos previsible: conectar con una audiencia que, en muchos casos, ni siquiera vivió el original en su emisión.
El regreso al instituto Zurbarán ha servido para pulsar de nuevo la temperatura generacional, esta vez desde el lenguaje de las plataformas, los conflictos postpandemia y la sensibilidad narrativa de un tiempo que ya no tolera discursos calcados del pasado. Y eso (más allá de cualquier etiqueta comercial) es lo que ha dado sentido a esta continuidad. La renovación por una segunda temporada no es un gesto de cortesía: es el resultado de un rendimiento que ha superado todas las expectativas internas de Atresmedia.
La serie ha sido el mejor estreno de una ficción original en dos años para la plataforma. No solo en visualizaciones, sino en algo más valioso: activación de suscripciones y fidelidad de visionado. El dato relevante es demográfico: el grueso del público tiene menos de 30 años. No es el target nostálgico, es uno nuevo. Uno que entiende el tono, se reconoce en los personajes y consume la historia en bloque, de principio a fin. En tiempos de dispersión digital, ese comportamiento ya vale su peso en renovación.
La ficción, creada por Carlos García Miranda, ha sabido articular los códigos de la serie original con los de la generación actual, sin necesidad de subrayar. Hay sexo, identidad, presión social, redes, salud mental y vínculos complejos. Lo que cambia no es el catálogo de temas, sino el modo de abordarlos. El reparto (con nombres jóvenes como Rocío Velayos, María Bernardeau o Biel Antón) responde bien al reto. Y el plantel de adultos, encabezado por Israel Elejalde, Itziar Miranda y Silma López, aporta el equilibrio necesario entre representación y experiencia actoral.
Montse García, directora de Ficción de Atresmedia, lo resume con precisión: "Física o Química"La frase podría parecer obvia, pero encierra lo esencial. No se trata de replicar el pasado, sino de usar el eco de lo que fue para hablar de lo que es. Y ahí está el acierto. La serie no necesita rendir culto al mito, porque sabe que está construyendo el suyo propio.
La segunda temporada, aún sin fecha de estreno, servirá (según avanza la cadena) para profundizar en los personajes, ampliar tramas y dar más dimensión al universo Zurbarán. No se trata solo de seguir. Se trata de consolidar una marca que ha encontrado una nueva respiración. Ya no se trata de revivir "Física o Química". Se trata de entender que su legado ahora habla otro idioma, y sigue teniendo cosas que decir.