Refugio sostenible al oeste de Zamora

Una grata sorpresa de carácter natural espera al viajero que llega hasta la raya fronteriza que divide imaginariamente a las provincias de Zamora y Salamanca colindantes con Portugal. Se trata de la Reserva de la Biosfera Transfronteriza Meseta Ibérica, considerada la más grande de este ámbito en toda Europa, no en vano incluye nada menos que cuatro Parques Naturales y diversos espacios de la Red Natura 2000.

Un total de 87 municipios se cobijan al abrigo de esta espectacular Reserva de la Biosfera, que invita al viajero a disfrutar de un impresionante mosaico de paisajes entre los que se puede contemplar desde cimas de más de 2.000 metros de altitud del Parque Natural del Lago de Sanabria y alrededores, lleno de lagunas, valles encajados y protagonizado por el mayor lago de origen glaciar de la península Ibérica, hasta uno de los espacios geológicos más antiguos, integrado en el Parque Natural de Montesinho, que permiten observar fragmentos con muchos millones de años de viejos continentes bajo las montañas bajas y colinas de esta zona. Pero eso no es todo, ya que el viaje por el tiempo se complementa con el espectáculo paisajístico que supone divisar los cañones fluviales abiertos por el río Duero y su afluente Águeda en la misma raya fronteriza, que conforman el Parque Natural de los Arribes y el Parque Natural Douro Internacional.

Para toda la familia

Con este impresionante plantel como telón de fondo, la aventura que puede vivir el viajero por estas tierras zamoranas resulta inolvidable para todos los miembros de la familia, ya que es una zona ideal tanto para visitarse con niños como en pareja o con amigos. De hecho, la comarca cuenta con un puñado de rutas muy bien señalizadas y preparadas para el turismo, así como un amplio abanico de establecimientos y servicios diseñados para cumplir con todas las expectativas del viajero.

La Reserva de la Biosfera Meseta Ibérica se alza, además, como un espacio fronterizo entre los climas mediterráneo propios del interior de la península Ibérica y el clima atlántico propio de Portugal, lo que explica la enorme biodiversidad de fauna y de flora que puede encontrarse en esta zona. De hecho, aquí se refugian especies en peligro de extinción y varios tesoros botánicos únicos. Entre otros hitos, esta zona puede presumir de concentrar la mayor densidad de lobos de Europa, ya que habitan en las serranías de la Culebra, compartiendo territorio con venados, jabalíes y, por supuesto, con los rebaños de ovejas que se alzan como una de las fuentes de riqueza más importantes de los pueblos de esta zona. Y si se mira al cielo también es posible disfrutar del vuelo de cigüeñas negras, águilas y alimoches, entre otras especies, en los escarpes de los Arribes y el Douro Internacional, así como especies de mariposas exclusivas y rarezas como el mejillón de río.

Paseando por la Reserva de la Biosfera Transfronteriza Meseta Ibérica el visitante puede adentrarse en lo más profundo de la cultura local, pues aquí se esconde una gran riqueza patrimonial y cultural, gracias a los diferentes pueblos de este espacio llenos de historia y tradiciones, con una gastronomía propia de enorme calidad en la que destacan las carnes, los quesos y los productos silvestres que proceden de sus montes, así como los frutos mediterráneos del valle del Duero. Más información en la web www.turismoenzamora.es.

Interior del coqueto pueblo de Santa Cruz de los Cuérragos