Tras la debacle electoral, la vida sigue. Con esta imagen del grupo parlamentario quiso demostrar ayer Ciudadanos que el trabajo de la formación continúa, tanto a nivel orgánico como en la Cámara y en San Telmo. El líder del partido en Andalucía, Juan Marín, volvió a insistir en que los resultados del pasado domingo «no van a cambiar absolutamente nada» el pacto de gobierno que mantienen con el PP en la Junta, a pesar de lo que afirman dirigentes regionales para evitar el acuerdo PSOE-Unidas Podemos. «Andalucía no va a ser moneda de cambio para absolutamente nada. Aquí hay estabilidad y hemos aprobado dos presupuestos en seis meses», subrayó Marín, no sin antes pedir al PP que «asuma su responsabilidad» y se abstenga. Marín hizo estas afirmaciones después de que el vicepresidente de la Junta de Castilla y León y líder de Cs en esta comunidad, Francisco Igea, se mostrara abierto a que su partido se replantee «alguna parte» de su «estrategia» en acuerdos de gobernabilidad autonómicos si el PSOE frena su preacuerdo con Podemos e impide que el país se separe «en dos bandos». El vicepresidente andaluz insistió en que la «inmensa mayoría» de españoles aboga por la abstención del PP para la investidura del socialista Pedro Sánchez como presidente, lo que evitaría el pacto con Unidas Podemos, e incluso por un pacto de gobierno entre ambos partidos constitucionalistas. «Me tiemblan las piernas, y a muchos españoles también, de pensar que la economía española pueda estar en manos» del líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, señaló Marín antes de reiterar que «el único que puede impedir un gobierno en España entre Sánchez e Iglesias es Pablo Casado. Si no lo hace, tendrá que explicar por qué toma esta decisión».