PSOE

Díaz insta al Gobierno de Moreno a hacer "las cosas mejor” en el avance de Andalucía en la desescalada

Pide a la Junta que pase “a otra fase” con la oposición, que “se deje ayudar”, y le exige “más rigor”

a
a larazonPSOE-A

Covid-19 ha dejado una marca de su poder en los rostros de la gente, las mascarillas, y ha evidenciado que en terrenos resbaladizos como la política, hay quienes han dejado de encajar en los moldes que se usaban antes de la sacudida. En Andalucía, la líder de la oposición y secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, contrala el tono y mide el nivel de decibelios de sus palabras, porque ha aseverado que quiere “remar” con el Gobierno autonómico durante la crisis, pero aísla parcelas de la actualidad para marcar posiciones. Hoy se mostrado “convencida” de que Málaga y Granada pasarán a la fase 1 de la desescalada en breve, pero luego ha exigido “rigor” al Ejecutivo regional, tras mantener una reunión por videoconferencia con la patronal y los sindicatos CC OO y UGT.

En una conferencia de prensa telemática ha calificado de “preocupante” el que dos consejeros “digan cosas contradictorias", en alusión a que el vicepresidente de la Junta, Juan Marín, haya afirmado que la comunidad se encuentra en una situación que le permitiría "pasar a fase 2 mañana mismo”, mientras el titular de Salud, Jesús Aguirre, ha avisado del riesgo de que se pudiera producir un «problema serio de colapso» en el sistema sanitario autonómico, si la mayoría de la población «baja la guardia» y se produce un rebrote.

Para Díaz, “no ha merecido la pena la semana de titulares gruesos, de enfrentamiento y de poner en cuestión la seguridad de los malagueños y de los granadinos por siete días", cuando, además, “se ha conocido desgraciadamente que no sólo había un plan de desescalada” de la Junta, no se ha garantizado “el aislamiento de las zonas que pudiesen verse contagiadas por un repunte” y "los propios sanitarios de Málaga y Granada manifestaron que no estaban en condiciones de pasar de fase”. La dirigente socialista ha lamentado esas actitudes “irresponsables”, que espera que “no se vuelvan a repetir”. Confía también, así lo ha deslizado, en que el Ejecutivo regional que capitanea Juanma Moreno, haya entregado ahora “la documentación necesaria con las condiciones, los indicadores y las medidas que van a proteger a malagueños y granadinos para poder pasar a la fase 1” y que "en el futuro”, cuando lo que esté en juego sea el avance a otros niveles de desconfinamiento, "se hagan las cosas mejor”.

Díaz ha desvelado que el presidente del Gobierno central, Pedro Sanchez, le ha trasladado que a partir de ahora las comunidades van a tener mayor “capacidad de decisión”, que van a asumir más competencias en el levantamiento progresivo de las restricciones impuestas por la declaración del Estado de alarma. En ese punto, ha insistido en pedirle a la Junta “más rigor” y que escuche a los sanitarios para que no tengan que volver a "vivir situaciones como la del Hospital Macarena” de Sevilla, donde se han producido un elevado número de contagios entre el personal.

La máxima dirigente del PSOE-A ha reclamado además a los miembros del equipo de Moreno que “entren” ellos también “en otra fase” de “colaboración con la oposición” y de “transparencia”, ya que hasta el momento, según ha denunciado, “se ha contado a los portavoces socialistas lo que horas antes habían leído en los medios de comunicación”.

“Le pido al Gobierno de Andalucía que se deje ayudar”, ha llegado a plantear, para garantizar que su partido acudirá a la comisión parlamentaria creada para la reconstrucción tras el coronavirus “con el ánimo de colaborar”. Si bien, ha sostenido que “no es bueno” que se hagan anuncios como el de la apertura de playas o piscinas el 25 de mayo, “cuando no hay ni protocolo” todavía y se ha demandado "a los ayuntamientos que tengan los planes de contingencia en un mes”, con lo que será “imposible” que se cumpla ese calendario. De hecho, hoy se ha adelantado que se barajan fechas de junio. A juicio de Díaz, el Ejecutivo de Moreno tiene que apuntar su gestión de la pandemia, ya que “hay descoordinación e improvisación”, ha abrochado.