El consejero andaluz de Salud: “Ojalá pudiera quitar a 58 fallecidos, pero son los que son, 1.392”

“No comprendo este baile de cifras al que nos está sometiendo el ministerio, sobre todo, en un tema tan sensible como son nuestros fallecidos a lo largo de esta pandemia”, ha admitido hoy el consejero de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, ante la alquimia numérica de las últimas horasque permitió, por ejemplo, que ayer se desvanecieran 58 muertes en la comunidad, después de que Sanidad haya modificado el método de elaboración del parte diario ligado a los afectados por el coronavirus; o que Cataluña contabilice ahora 900 decesos menos. Ha advertido de que esa variación ha creado “desconfianza e intranquilidad” en la población y de que “no se puede jugar” con los muertos y las familias.

“Tenemos nombre y apellidos de cada uno de los fallecidos, son personas, a quién quito de la lista”, se ha llegado a preguntar en la comparecencia telemática posterior a la reunión del Consejo de Gobierno de hoy, para constatar luego que la hilera “es la que es, por desgracia”. “Ojalá pudiera quitar a 58, pero son los que son, 1.392 por mucho que el ministerio me diga que son 1.334”, ha querido dejar claro.

Aguirre ha reconocido que no entiende el continuo cambio de criterio impulsado desde Madrid, cuando, entre otras cuestiones, “en los certificados de defunción pone por coronavirus”. En ese escenario líquido, el titular andaluz de Salud ha exigido al Gobierno central "máxima transparencia” y que se aclare la nueva fórmula para contar fallecidos o positivos confirmados por PCR. En relación a este último punto, el desfase de este lunes era de 451 casos menos, tras confirmar la consejería 12.599 casos detectados gracias a esa prueba, y anotar el ministerio que dirige Salvador Illa que eran 12.450. También hay discrepancias entre ambas administraciones sobre el número de hospitalizados o el de ingresados en unidades de cuidados intensivos (UCI) de la comunidad.