Templos llenos en un extraño Lunes Santo

Lunes Santo templado y nuboso, acorde con el ánimo de los cofrades en una Semana Santa huérfana de procesiones por la pandemia. Tras una jornada de Domingo de Ramos multitudinaria en Andalucía, los templos de las hermandades que debieron procesionar esta jornada también registraron colas y mucha afluencia de fieles. Sin embargo, no se produjeron tantas aglomeraciones porque fue día laborable y la vida continuaba su curso, con las medidas para evitar la propagación del coronavirus muy vigentes.

Los políticos no quisieron faltar a la cita con esta Semana Santa tan atípica. El presidente de la Junta, Juanma Moreno, acudió a la hermandad de la Esperanza de Triana de Sevilla, feudo «susanista» porque la líder del PSOE-A –preocupada más que nunca ahora por cuestiones orgánicas– es hermana de la corporación trianera. En la capilla de los Marineros contempló los altares del Cristo de las Tres Caídas y de la Esperanza de Triana, expuestos de forma que los fieles puedan contemplar las imágenes de una manera más cercana. Posteriormente, visitó el centro de apoyo infantil, la principal obra social de la cofradía de la «Madrugá». Díaz, por su parte, acudió a la hermandad de San Pablo, una cofradía que concentra la devoción de todo un barrio. También hizo lo propio el vicepresidente de la Junta, Juan Marín, que se acercó a la hermandad de Santa Marta, donde coincidió con la ofrenda que anualmente hace la patronal de hostelería. Igualmente, el consejero de la Presidencia, Elías Bendodo, y la titular de Cultura, Patricia del Pozo, visitaron la sede del Consejo de Cofradías de Sevilla y la hermandad del Gran Poder.

En Jerez, la ministra de Industria y Turismo, Reyes Maroto, recorrió la exposición cofrade instalada en los claustros de Santo Domingo, donde pudo contemplar el rico patrimonio que atesoran las hermandades jerezanas.

Sevilla y Málaga no faltaron a su cita con los Cautivos. En Sevilla, el barrio del Tiro de Línea se volcó con su cristo, situado bajo el altar mayor muy cerca los fieles. Detrás, en un altar extraordinario, la Virgen de las Mercedes presidía la parroquia, inundada de flores y plegarias. Otras corporaciones hicieron montajes especiales, como la hermandad de la Redención en la iglesia de San Ildefonso, su sede provisional. El Señor de la Redención aparecía con un olivo detrás rodeado de las imágenes secundarias que lo acompañan cada Lunes Santo en el paso.

En Málaga, el Cautivo y la Virgen de la Trinidad recibieron a los cofrades en sus tronos en la casa de hermandad, abierta de par en par para que pudieran ser contemplados desde la calle. El trono del Señor de Málaga acaba de ser remodelado, por lo que se pudo admirar el resultado del trabajo realizado. Las demás cofradías malagueñas expusieron a sus titulares en veneración, la tónica habitual de una Semana Santa atípica que no pierde la intensidad cofrade.

En Córdoba, la Mezquita-Catedral volvió a acoger un acto penitencial con las hermandades, que acudieron en representación con sus estandartes. El obispo, Demetrio Fernández, dirigió el acto y, posteriormente, las cofradías en sus templos veneraron a sus titulares. La Merced, la Vera Cruz, la Estrella, la Sentencia, el Vía Crucis y el Remedio de Ánimas expusieron a sus imágenes en altares llamativos.