Semana Santa
Una ola de fervor que no cesa
Los templos de las hermandades que debieron procesionar el Martes Santo volvieron a acoger largas colas de fieles, respetando las normas anticovid
La cuarta ola de la pandemia ya la tocamos con los dedos. Los hospitales andaluces vuelven a superar el millar de pacientes con coronavirus, una cifra que nos deja helados y nos recuerda que hay que extremar la precaución. Otra ola, la del fervor, sigue aumentando conforme avanza la Semana Santa. Es Martes Santo y, a pesar del frío y las leves gotas caídas por la mañana, las colas de cofrades se volvieron a extender a las puertas de las iglesias por las que deberían haber salido las hermandades de la jornada.
En Sevilla, emoción contenida en el Cerro del Águila, un barrio que vive intensamente la salida de su hermandad y que, por segundo año consecutivo, vio cómo el Cristo del Desamparo y Abandono, el Nazareno de la Humildad y la Virgen de los Dolores se quedaron en casa. La parroquia fue un hervidero de devotos, que inundaron el templo de flores y plegarias. También se vieron colas en el Rectorado de la Universidad. En la capilla, el Cristo de la Buena Muerte y la Virgen de la Angustia componían un «stabat mater» invitando a la oración y al recogimiento. La dolorosa portaba una cruz pectoral del arzobispo castrense Juan del Río, fallecido recientemente.
Otras corporaciones expusieron a sus titulares en altares especiales, como los Javieres, San Benito, Santa Cruz, San Esteban y el Dulce Nombre. Mientras, la gente cruzaba el centro de la ciudad buscando los templos, con programas de exposiciones y guías en la mano. El ambiente era el de una jornada habitual de Semana Santa, pero sin pasos en la calle en los que fijar la mirada.
En Granada, el monasterio de San Jerónimo acogió un acto en el que la hermandad de la Soledad, conocida popularmente como la de «las Chías», recuperó la tradición, suspendida en 2020 por la pandemia, de liberar a un preso en Semana Santa, este año sin procesiones. El hermano mayor de la Soledad y Descendimiento, Enrique Crespo, señaló que el acto se trasladó al martes en vez de celebrarlo en Viernes Santo, cuando tradicionalmente procesiona la hermandad, para ese día poder centrarse en la recepción de los devotos que están llenando los templos de Granada, en el acompañamiento a las hermanas jerónimas en los Santos Oficios y en los cultos ante el altar.
El preso común liberado, que ya tenía el tercer grado, mostró su alegría por poder empezar «una vida nueva», ya reinsertado con su familia y su trabajo. Estuvo sentado en primera fila junto a varios funcionarios del Centro de Inserción Social, como es tradicional, en un acto que contó con la asistencia, entre otras autoridades, del alcalde de Granada, Luis Salvador; la subdelegada del Gobierno, Inmaculada López Calahorro; y el presidente de la Audiencia Provincial, José Luis López Fuentes.
En Málaga, la Virgen de la Piedad no portó el tradicional manto de flores naturales confeccionado por el servicio de parques y jardines municipal. Sin embargo, el Ayuntamiento, representado por el alcalde, Francisco de la Torre, sí realizó una ofrenda floral a la imagen, renovando así una tradición que se remonta al año 1944. En Almería, los tambores que acompañan al Cristo del Perdón no sonaron, aunque la imagen sí recibió las oraciones de los devotos. El Amor y la Coronación también registraron muchos fieles durante la jornada.
✕
Accede a tu cuenta para comentar