«Aline» deja 15 hm3 en los embalses de la CHG

La borrasca «Aline» ha dejado a su paso múltiples incidencias pero también ha aliviado con sus precipitaciones el campo andaluz, tan castigado por la sequía. La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) informó de que las primeras lluvias del año hidrológico han dejado en la cuenca una precipitación media de 47 l/m2, con «una distribución bastante homogénea por todo el ámbito territorial de la demarcación».

Estas precipitaciones, según la CHG, han servido principalmente para que el terrero alcance un grado de humedad suficiente para que comiencen a producirse las escorrentías, que se traducirán en aportaciones a los embalses.

De hecho, ya se están produciendo de tal manera que las reservas no solo no han descendido sino que han registrado un aumento de unos 15 hm3 en el conjunto de los embalses. De confirmarse los pronósticos de lluvias para los próximos días, estas aportaciones podrían aumentar de forma significativa.

Las precipitaciones de esta semana también han servido para recuperar los caudales mínimos en los cauces y para dar por totalmente concluida la campaña de riego. En la actualidad, la cuenca hidrográfica del Guadalquivir se sitúa al 18% de su capacidad, con 1.448 hm3 almacenados.

El consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, Ramón Fernández-Pacheco, valoró de forma positiva la llegada de las lluvias a la comunidad autónoma, unas precipitaciones que «no van a solucionar el problema de la sequía» pero que suponen «un desahogo».

En la jornada de este viernes, las lluvias se concentraron en las provincias de Jaén y Granada. En Cazorla se registraron más de 32 litros por metro cuadrado, más de 26 en el municipio granadino de Víznar, 26 en Bailén, 22 en Santa Elena y 18 en Villanueva del Arzobispo. Sin duda, un respiro para el olivar, producción que predomina en todo el territorio.