Patrimonio

El desafío de restaurar las cúpulas de la Mezquita-Catedral de Córdoba

Por primera vez en 200 años, se rehabilitará la Maqsura, una "obra extraordinaria" del siglo X

Turistas en el interior de la Mezquita-Catedral de Córdoba
Turistas en el interior de la Mezquita-Catedral de CórdobaEP

El Cabildo de la Catedral de Córdoba ya ha presentado a la Junta de Andalucía el proyecto de restauración de las cúpulas de la Maqsura de la Mezquita-Catedral, proyecto redactado por los arquitectos Gabriel Ruiz Cabrero, Gabriel Rebollo Puig y Francisco Rebollo Piriz. El objetivo es resolver los problemas de estanqueidad y ventilación de las cubiertas. Las obras, que comenzarán en cuanto la Junta dé su aprobación al proyecto, tendrán una duración estimada de tres años y contarán con un presupuesto de alrededor de 4 millones de euros.

«Este proyecto es consecuencia de muchísimos años de trabajo», apunta el jefe técnico del mismo, Gabriel Ruiz. En 1999 comenzaron a hacer dibujos para conocer las cúpulas y luego el Instituto Andaluz de Patrimonio hizo unos estudios de humedad y temperatura que duraron «mucho tiempo». Los resultados, explica, se compartieron en unas jornadas con arquitectos, arqueólogos e historiadores que dieron su visión. Desde ese momento, «nos lanzamos» a hacer el proyecto un «equipo pluridisciplinar» formado por arqueólogos, restauradores de mosaicos y pinturas, aparejadores y arquitectos. Es un trabajo complicado porque se trata de una obra extraordinaria del año 961-965, «muy delicada». En lo esencial, según Ruiz Cabrero, «está muy bien conservada porque fue divinamente hecha». «Los técnicos, arquitectos y canteros de Al-Hakan eran fantásticos, entonces estructuralmente está muy bien, pero periódicamente hay que repasar», indica.

La rehabilitación de las cúpulas de la Maqsura se hará por fases, tal y como especifica el arquitecto responsable. Se empezará desmontando la cubrición de tejas de las tres linternas, inspeccionando el tablero de soporte y restaurándose con materiales idénticos. Luego se decrecerá la cornisa para habilitar sobre éstas unas aberturas de ventilación. Actualmente los parámetros de las linternas, es decir, los muros de cerramiento de las mismas, se encuentran muy deteriorados. Por eso, durante la restauración de estos, se quiere recuperar sus perfiles reconstruyendo los contrafuertes, así como los planos de fachada. El tercer paso será proteger las fábricas y consolidar la policromía original. Así, las celosías serán retiradas y restauradas para ser colocadas en su ubicación original. En cuanto a las maderas, se aplicará un tratamiento antixilófagos, para evitar que los insectos y los hongos penetren.

Una vez terminado el trabajo con las cubiertas, se procederá a rehabilitar el interior de las cúpulas. Se empezará con la oriental, intervenida en 1771 por Baltasar de Bretón por encargo del Cabildo, ya que amenazaba con derruirse. Se restaurarán sus enlucidos, los emplacados se consolidarán y sólo los irrecuperables serán repuestos. Las figuras decorativas están realizadas en yeso tallado y recibidas en huecos preparados en los plementos, sin que se observe ningún deterioro de importancia, por lo que solo se limpiarán.

La segunda cúpula será la occidental. Para ella, se ha pensado en la consolidación de enlucidos y emplacados. También se limpiará el mosaico, que ya fue restaurado por el arquitecto Nicolás Duroni en 1815. En las catas realizadas en los estudios previos de 2016 se documentaron grandes restos de pintura original sobre los arcos y parámetros de la cúpula occidental. Pues bien, el proyecto plantea la localización de los restos originales que aún se conservan y su consolidación.

Por último, se acometerá la restauración de la cúpula central y de su mosaico realizado por los artesanos del emperador de Bizancio en el año 965. En los estudios previos se identificaron con claridad las zonas originales y las restauradas, que se hicieron con diferentes técnicas. Se limitará las intervenciones a realizar para mantener la obra tal y como nos ha llegado a nosotros. La moldura cerámica que sustenta el octógono parece encontrarse en perfecto estado de conservación, por lo que solo se limpiará.

La Maqsura ha sido intervenida en varias ocasiones a lo largo el tiempo, l más importante en 1815. Pero ahora se hará una intervención total, impermeabilizando las cúpulas y asegurando las estructuras.

Un millón y medio de visitantes

Durante los trabajos de restauración de la Maqsura, el Cabildo de la Catedral de Córdoba no cerrará este espacio, ya que las obras se realizarán por fases. Así, los visitantes podrán seguir disfrutando de este conjunto monumental que en 2022 recibió un millón y medio de visitantes. El objetivo es recuperar los datos de 2019, cuando se llegaron a superar los dos millones de turistas.

Por lo que se refiere a los tipos de visitas, debe indicarse que de las 1.567.277 personas del año 2022, un total de 1.537.749 lo hicieron en horario diurno, en tanto que 29.528 lo hicieron en horario nocturno en la visita comercialmente conocida como «El Alma de Córdoba».