Granada, en fase de alerta, activa un plan ante el posible empeoramiento de la sequía

El Ayuntamiento de Granada y Emasagra, la empresa municipal de aguas, han anticipado un plan hídrico frente al posible empeoramiento de la situación de sequía que incluye la creación de un comité de sequía para evaluar posibles acciones, que pasarán de momento por seguir mejorando el rendimiento de la red para evitar fugas.

Según ha informado este viernes el portavoz del equipo de gobierno, Jorge Saavedra, Granada se sitúa en fase de alerta, según los indicadores y recursos superficiales disponibles por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, lo que ha llevado a Emasagra y al Ayuntamiento a actuar de manera preventiva y plantear medidas para abordar la situación.

Según ha detallado, las reservas hídricas superficiales actuales de los embalse que abastecen la ciudad de Granada han descendido casi un 30 %, pasando del 76 % el año pasado al 47,2 % actual.

Por embalses, el de Canales ha pasado del 75,7 % de su capacidad al 46,3 %, mientras que el pantano de Quéntar ha ido del 77,9 % al 52,1 %. Estos datos situaron a Granada en estado de 'Alarma' desde el pasado 8 de marzo.

Para anticiparse a situaciones venideras, Granada trabaja en el diseño, planteamiento y ejecución de un Plan de Resiliencia que cuenta con una inversión de más de 50 millones de euros en 15 años.

El objetivo, ha dicho Saavedra, es amortiguar en la medida de los posible los efectos del cambio climático y la ausencia de precipitaciones buscando la mejora de la eficiencia de las redes de abastecimiento y de saneamiento que preserven el recurso en sus ciclos de distribución de agua potable y de recogida de agua residual.

Dentro de las medidas planteadas, el Ayuntamiento y Emasagra han constituido ya a nivel interno un comité de sequía, formado por personal técnico para seguir evaluando posibles acciones que pasarán, de momento, por seguir mejorando el rendimiento de la red para evitar fugas y pérdidas de agua.

Estas medidas ya han permitido reducir un 4 % el consumo, principalmente por la mejora del rendimiento. La intención es también buscar una reducción del consumo mediante más campañas de concienciación ciudadana.

La compañía, que ha apostado por la descarbonización y el uso de las energías renovables como parte de su estrategia para luchar contra el cambio climático, tiene previsto abordar paulatinamente la mejora de tuberías, avanzar en la adaptación de las infraestructuras hídricas y seguir dando pasos en favor de la reutilización del agua, como retos encaminados a garantizar el abastecimiento y evitar restricciones en el suministro domiciliario.