Sol con viento en Aragón: ¿a cuántos kilómetros por hora llegará a soplar en Zaragoza?

Mejores noticias en el tiempo para este último domingo y penúltimo día del mes, pues el anticiclón que se acerca a la Península traerá de forma generalizada un ambiente más apacible y sin casi precipitaciones para toda la península ibérica, salvo en las islas Canarias, donde persistirán las precipitaciones en las más occidentales.

Si observamos el mapa isobárico de Aragón, solo hay una nota no tan positiva que incorporar a la predicción general anterior, de la Aemet: a lo pronosticado para toda España hay que sumarle a las tres provincias aragonesas el viento. Y es que este seguirá soplando con intensidad no solo en toda la comunidad aragonesa, sino en todo el nordeste peninsular y las islas Baleares.

Además del viento, así se espera la jornada

Así pues, lo único indeseable este domingo 30 de marzo en Aragón serán dichas rachas de viento, que por ejemplo en Zaragoza rozarán las 50 kilómetros por hora, porque por lo demás será un día ya, por fin, de primavera: los cielos estarán completamente despejados o solo parcialmente nubosos, con algunas nubes bajas en el Pirineo y la parte oriental de la cordillera Ibérica por la mañana, y de nubes altas por la tarde.

Conforme a las temperaturas que los meteorólogos predicen, las mínimas son prácticamente similares a las de días anteriores, mientras que las máximas ascenderán notablemente en Huesca, Zaragoza y Teruel, con máximas de 18, 17 y 16 grados respectivamente. Los más ‘extremo’ serán las posibles heladas en el Pirineo, siempre habituales en la zona, y débiles en zonas del Prepirineo y del sistema Ibérico.

La semana que viene

La tendencia hacia un tiempo estable y más propio de la primavera seguirá el lunes 31 de marzo y último de mes. La Aemet en la comunidad aragonesa prevé una jornada muy similar a la del domingo 30 de marzo en las tres provincias. Cielos parcialmente nubosos o despejados y temperaturas en ascenso, notables sobre todo en el sistema Ibérico y Pirineos. Pero, además, las rachas de vientos empezarán a aflojar en la Depresión del Ebro y, en el resto, ya estarán prácticamente en calma.

El martes y primer día de abril el escenario meteorológico será muy similar: cielo despejado o poco nuboso, aunque con más nubes al final del día. Todavía es pronto, pero las predicciones reseñan de nuevo precipitaciones, aunque débiles, en el último tramo de la tarde y solo en los Pirineos, aunque no se descartan de forma dispersa y puntual en el Sistema Ibérico o en el resto del tercio norte.

El martes 1 de abril ocurre algo nuevo: es la primera vez desde el comienzo de la primavera donde las temperaturas mínimas de las tres provincias ascienden, aunque las máximas se quedan igual.