Tesoros
Este es el pueblo abandonado que se ha convertido en uno de los más visitados de Asturias
Es una preciosa aldea que se ha convertido en un auténtico museo al aire libre, donde vas a poder conocer sistemas de agua que se utilizaban antaño
Asturias tiene cientos de pueblos preciosos que merece la pena visitar, y ocurre que en ocasiones, hay sitios que quedaron abandonados que se ponen en valor o que se descubren. Este es el caso de Os Teixois, una preciosa aldea de Taramundi que se ha convertido en un auténtico museo al aire libre, donde vas a poder conocer sistemas de agua que se utilizaban antaño y que sostenían la vida del pueblo.
Este rincón mágico, declarado Bien de Interés Cultural, conserva ingenios hidráulicos del siglo XVIII que siguen funcionando como hace cientos de años. Molinos, fraguas, mazos y hasta una rudimentaria central eléctrica conviven en armonía con la naturaleza, ofreciendo un viaje fascinante al pasado industrial y rural de Asturias. Si aún no lo conoces, deberías de planear una visita.
Ubicado a apenas 4 km de Taramundi, fue rehabilitado en los años 80 para mostrar cómo los antiguos habitantes de la zona aprovechaban la fuerza del agua del río para realizar tareas cotidianas. Uno de sus elementos más llamativos es el mazo, una herramienta movida por energía hidráulica que servía para trabajar el hierro y fabricar herramientas. Junto a él está en funcionamiento y en perfecto estado de revisión el molino, que transformaba el grano en harina, mientras que la fragua permitía reparar utensilios agrícolas.
Si te acercas a este lugar, donde ahora ya no vive nadie, verás cómo el agua activa las ruedas de los ingenios, cómo el mazo golpea el metal o cómo el maíz se convierte en harina. Además, el conjunto incluye un hórreo tradicional, un batán (usado para enfurtir tejidos) e incluso una pequeña central eléctrica que, en su día, suministró luz a las casas cercanas.
Aunque te parezca mentira, en este lugar del Occidente asturiano, sus habitantes fueron capaces de salir adelante con muy pocos medios, pero tirando de ingenio lograron llevar una vida plena. Eran autosuficientes en una época en la que nadie lo lograba y la visita a este lugar es mágica.
Os Teixois es un homenaje a la vida rural asturiana, donde cada mecanismo esconde una historia de esfuerzo y adaptación al medio. Las visitas guiadas explican con detalle el funcionamiento de cada elemento, haciendo que mayores y pequeños comprendan la importancia de este legado.
Cualquier época del año es perfecta para hacer una visita a este lugar, pero con la llegada del buen tiempo aún se hace más interesante. Una zona rural, preciosa y virgen, donde nació el turismo rural y donde todos los que se acercan se quedan enamorados.