CSIC
Identifican una proteína clave en el desarrollo del cáncer de páncreas
Investigadores de la Universidad de Barcelona (UB) han descrito una relación hasta ahora desconocida entre una proteína, denominada ‘HNRNPA2B1’, y el desarrollo del cáncer de páncreas.
La investigación, que publica la revista ‘Gastroenterology’, ha demostrado que en líneas celulares humanas cancerígenas (in vitro e in vivo) esta proteína es esencial para que funcione la proteína KRAS oncogénica, vinculada con el inicio y la progresión tumoral.
Según los investigadores, la interacción entre HNRNPA2B1 y la proteína codificada por el gen KRAS es una diana terapéutica potencial para el tratamiento del cáncer de páncreas, uno de los tumores con peor pronóstico.
La investigación ha sido dirigida por la profesora Neus Agell, catedrática de Biología Celular, Inmunología y Neurociencias de la Facultad de Medicina de la UB e investigadora del Instituto de Investigaciones Biomédicas August Pi i Sunyer (IDIBAPS).
En el trabajo también han participado Carles Barceló, investigador del mismo departamento de la UB, y científicos del Instituto Catalán de Oncología (ICO), del Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL), del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) y del Instituto del Cáncer Dana-Farber, adscrito a la Escuela de Medicina de Harvard (EEUU).
Según ha explicado Neus Agell, más del 90 % de los cánceres de páncreas contienen mutaciones del gen KRAS, que ayuda a la célula a interpretar lo que pasa a su alrededor y le indica qué acciones debe hacer a continuación, como por ejemplo reproducirse o morir.
Muchos tumores, como los de páncreas, pulmón o colon, tienen este gen mutado, por lo que siempre está señalizando que las células cancerígenas proliferen, independientemente de la información que llega del medio exterior de la célula.
Durante más de 30 años, los científicos han tratado infructuosamente de inhibir KRAS para detener el desarrollo tumoral.
«La estrategia de nuestro grupo es conocer mejor cómo regula la célula la actividad y el funcionamiento de KRAS, de modo que si no podemos inhibir directamente la acción del KRAS oncogénico, lo que hacemos es tratar de impedir la interacción con otras proteínas para evitar que funcione, e influir así en los tumores», ha dicho Agell.
Los investigadores estudiaron qué proteínas interactúan con KRAS en células cancerígenas y seleccionaron la proteína HNRNPA2B1.
El paso siguiente fue bloquear esta proteína en dos conjuntos diferentes de líneas celulares de adenocarcinoma ductal pancreático (PDAC) -el tipo de cáncer de páncreas más común- para ver los efectos en el crecimiento tumoral.
«El resultado de silenciar esta proteína fue que se redujo la proliferación y crecimiento de las células cancerígenas, y también el aumento de la muerte celular, pero sólo en las líneas celulares dependientes de KRAS», ha destacado Neus Agell.
Los efectos se repitieron posteriormente cuando inyectaron estas células cancerígenas humanas en ratones, en los que comprobaron también que al silenciar la proteína HNRNPA2B1, las líneas celulares dependientes de KRAS redujeron el crecimiento tumoral.
Esta investigación se suma a un trabajo anterior del mismo grupo en el que localizaron otras moléculas que también intervienen en la regulación de la actividad de KRAS en la célula.
Se trataba de una enzima clave en un proceso llamado fosforilación, por el que se añade un fosfato en el gen KRAS.
«En células de ratones demostramos que si se inhibe esta enzima, KRAS señaliza menos y las células son menos oncogénicas. De esta manera, podemos atacar KRAS desde dos vertientes: eliminando la interacción con la proteína HNRNPA2B1 o bien bloqueando el proceso de fosforilación», ha informado la profesora de la UB Montserrat Jaumot, que también ha participado en el trabajo.
El siguiente paso de esta investigación para el grupo de la UB es conocer mejor cómo funcionan estas modificaciones de KRAS, para diseñar fármacos que puedan bloquear el tumor.
✕
Accede a tu cuenta para comentar