Ciencias humanas
Los plásticos de los envases llegan al organismo
Una investigación analiza las heces de personas de ocho países y halla compuestos comunes como el polietileno y el tereftalato de polietileno
La batalla contra el plástico no debe limitarse a razones medioambientales, sino también de salud. Hasta el 90 % de la basura marina podría ser plástica y además crece sin parar, a un ritmo de ocho millones de toneladas al año. No sólo por la contaminación que provocan y las huellas que dejan al descomponerse, sino porque un trabajo, publicado esta semana en “Annals of Medicine”, subraya que llegan al organismo del ser humano, donde pueden provocar cambios metabólicos importantes.
Sin embargo, este estudio pone en cuestión una reciente afirmación de la a Organización Mundial de la Salud (OMS) que subrayaba que “ninguna evidencia sólida apunta a que la presencia de partículas de microplásticos en el agua potable sea una amenaza grave a la salud pública”, según los resultados de un extenso análisis realizado por ellos.
La investigación que ha contado con ocho adultos de diferentes puntos del planeta, como Japón, Rusia, Países Bajos, Reino Unido, Italia, Polonia, Finlandia y Austria. El estudio se basó en que cada uno dio a los científicos una muestra de sus heces durante un periodo determinado. Los participantes también hicieron un diario con lo que comían de seis a siete días antes de recoger la muestra. Además, también tenían que contar apuntar los ingredientes de la pasta de dientes, la goma de mascar y los productos cosméticos que usaron.
Los científicos de Austria para la Universidad de Medicina de Viena y la Agencia de Medio Ambiente de Austria buscaron diez plásticos comunes en las heces. El equipo localizó una media de 20 partículas microplásticas por cada 10 gramos de desechos humanos. Las heces humanas adultas pesan aproximadamente 100 gramos.
¿De dónde vienen los plásticos?
El problema que señala la investigación está en que la mayoría de los alimentos que los participantes comieron estaban presentados o almacenados en plástico. Siete de ellos consumían bebidas de botellas de plástico todos los días, seis comían mariscos, mientras que tres empleaban productos cosméticos como gel de ducha, gel de baño o crema para manos que contenía polímeros sintéticos. Ninguna de las pastas dentales o gomas de mascar contiene microplásticos, según detalla el envase.
Los plásticos más comunes encontrados en las heces fueron el polietileno y el tereftalato de polietileno. El primero es el compuesto más común de este tipo el mundo y se usa para fabricar productos como bolsas de compras; mientras que el segundo se emplea en artículos tipo telas de prensado permanente, película fotográfica y botellas de plástico.
Con estos descubrimientos, los científicos subrayan que las personas ingieren estos plásticos de una variedad de fuentes, incluido el procesamiento, la preparación y el envasado de productos alimenticios, así como en el agua y el aire. Sin embargo, los plásticos estudiados no estaban presentes en los productos de cuidado personal.
Por el momento, el trabajo muestra sólo la existencia del plástico en el organismo y los investigadores abren la puerta a cuestionarse qué daños pueden dejar en el sistema gastrointestinal, así como qué efectos pueden tener a nivel metabólico.
Así, datos de otros estudios existentes sugieren que la persona promedio toma 13.731 a 68.415 partículas microplásticas del aire por año; 4.400 a 5.800 de agua del grifo; 123 a 11.000 de mariscos; y 37 a 1.000 de sal.
✕
Accede a tu cuenta para comentar