El alza de las pensiones, lastre para la Sanidad

El acuerdo con el PNV reduce la tarta para otros pilares del Estado del Bienestar en los presupuestos de este año

La negociación de los presupuestos no pinta nada bien para la Sanidad. El pacto entre el PP y el PNV dará aire a las pensiones, pero como no hay dinero para todo, lo que gane uno de los pilares del Estado del Bienestar lo perderá el otro o, en el mejor de los casos, dejará de ganarlo. En total, las pensiones absorberán más de 140.000 millones de la tarta presupuestaria. Si añadimos el obligado pago de los intereses de la deuda queda poco margen para apuntalar un Sistema Nacional de Salud que resiste con heridas graves el bombardeo de la crisis. Los presupuestos autonómicos para los servicios regionales de salud no experimentarán, por tanto, alteraciones sustanciales este año con respecto a lo ya previsto, y habrá que esperar a la instauración del nuevo sistema de financiación que pergeña el Ministerio de Hacienda para comprobar si se produce o no una inyección de fondos extra para oxigenar la Sanidad. En principio, este sistema permitirá que las autonomías obtengan más recursos, pero ello no es sinónimo de que ese dinero extra vaya a parar a la Sanidad, que podrá ganar más, eso sí, con las previsibles quitas de deuda que se apliquen a los feudos. La esperanza para el modelo sanitario recae en mayor medida en estas quitas que en las propuestas que formulen los consejeros en el seno del Consejo Interterritorial de Salud. La experiencia indica que lo hablado en ese foro suele interesar poco al Consejo de Política Fiscal.