Más medidas de la Junta de Castilla y León para combatir el absentismo

Combatir el absentismo ante el temor de los padres de que sus hijos puedan pillar el virus en los centros educativos de la Comunidad. Para ello, la Junta continúa implantando más medidas de seguridad en estos espacios, «seguros», según la consejera de Educación, Rocío Lucas, a pesar de que en la actualidad existan 370 aulas cerradas en toda la Comunidad, lo que suponen un 2 por ciento de todas las existentes en Castilla y León.

Tras insistir en que de momento no se van a cerrar los colegios, ya que sólo se hará si existiera un confinamiento total, aunque ha admitido que tras el regreso de las vacaciones navideñas se han clausurado más aulas como medida preventiva debido al incremento exponencial de contagios en las calles y sociedad, aunque no en un porcentaje relativamente alto para su cierre total.

Entre los mecanismos de seguridad figura la realización de un mayor test de antígenos con el fin de rastrear contactos estrechos y la adquisición de medidores de CO2 con el fin de regular la ventilación en las clases. La próxima semana comenzarán a llegar las primeras remesas.

Respecto a la gratuidad de los libros con el fin de llegar a todas las familias de la Comunidad que lo necesiten, la consejera ha anunciado que se ampliarán los umbrales de renta para ser beneficiario el próximo curso y que será de 2,5 veces el IPREM a 2,65. La nueva convocatoria contará con una dotación de 18 millones de euros, diez para los materiales del banco de libros de texto y ocho para las ayudas dinerarias. Una cantidad, que como ha indicado Lucas, podría ser ampliable hasta el límite necesario para el abono de las ayudas concedidas.

La titular de Educación ha destacado que el número de beneficiarios del presente curso «demuestra el esfuerzo que realiza la Junta para llegad cada año a más familias de la Comunidad». De esta manera, en el presente curso se han beneficiado un total de 90.540 estudiantes, lo que supone el 43,5 por ciento del total de estudiantes en las enseñanzas obligatorias, ya bien mediante el préstamo de los ejemplares o a través de ayudas directas para su compra, lo que supone haber llegado a 2.310 familias más.

La Consejería ha reconocido el derecho a la gratuidad de libros de texto a 66.034 alumnos a lo largo de este curso.