Ilusiones renovadas en la desescalada de la hostelería, centros comerciales y gimnasios

Tras 54 días cerrados, gimnasios, centros comerciales y salas de juegos y apuestas han vuelto a poder abrir sus puertas al público debido a la mejora de la situación epidemiológica. También la gente ha podido entrar al interior de bares y restaurantes. Algo que los clientes han agradecido debido al descenso brusco de las temperaturas ya que se ha pasado de un tiempo primaveral el domingo a uno invernal este lunes. De hecho, en Burgos ha llegado incluso a nevar esta mañana.

Pero pese a estas mejoras que al menos llevan algo de esperanza y de ilusión a los sectores afectados, todavía sigue habiendo restricciones que impiden que estas actividades se puedan llevar a cabo con normalidad. Así, en hostelería y restauración, el consumo dentro del local no se puede hacer en barra o de pie y debe realizarse sentado en mesa o agrupaciones de mesas, no pudiendo superarse el33 por ciento del aforo. Se limita, además, la ocupación máxima de mesas o agrupaciones de mesas a seis personas. En todo caso, la distancia mínima entre mesas o agrupaciones de mesas es de 1,5 metros en terrazas al aire libre, y de dos metros en el interior de los establecimientos. Las terrazas continúan con un máximo el 75 por ciento del aforo.

Los centros comerciales y comercios minoristas deben también respetar un tercio del aforo tanto en locales de interior como en zonas comunes. Además, se mantiene la práctica de deporte al aire libre sin restricciones pero respetando las medidas preventivas individuales generales.

Y en las instalaciones cerradas, como son los gimnasios y centros deportivos, se permite un tercio del aforo, con uso obligatorio de la mascarilla pero solo para el desarrollo de deporte sin contacto físico y máximo seis personas simultáneamente.

Los hosteleros consideran estas medidas “insuficientes” para poder realizar su actividad con cierta normalidad. Prueba de que aún persiste el malestar por las restricciones es que la asociación de hosteleros de Valladolid mantiene para mañana las protestas de “platos rotos” que lleva a cabo desde hace varias semanas. Incluso del presidente de la Federación de Hosteleros de Castilla y León, Fernando de la Varga, expresa su temor a que el relajamiento en las restricciones sea solo temporal y se pueda volver a los cierres totales del interior en el caso de que se llegue a producir un repunte la pandemia.

El daño ya esta hecho y en el sector calculan que un 20 por ciento de los hosteleros se quedarán en el camino ya que los cierres han hecho inviables sus establecimientos y por ello reclaman que se tenga en cuenta que muchos locales trabajan exclusivamente la barra y otros tienen demasiado personal, por lo que con un tercio de aforo no les es rentable abrir.

Pese a ello, en ciudades como Segovia, por ejemplo, han abierto la práctica totalidad de bares y restaurantes ha abierto, algo que para el presidente de la asociación Hostelería y Turismo de Segovia, Jesús Castellanos, prueba la “imperiosa necesidad” que tiene el sector de “abrir y facturar”, aunque no les compense.

En cuanto a los centros comerciales, en Valladolid ha abierto el Río Shopping, el principal de Castilla y León y que da trabajo a 2.500 personas, en una jornada de “absoluta normalidad” y “bastante afluencia”, pero sin las aglomeraciones que se podrían esperar tras dos meses en los que solo estaban abiertos los servicios esenciales, según explica Juan Ros, en declaraciones recogidas por Efe.

Una apertura marcada por el cumplimiento de las medidas y la garantía de seguridad y salud de clientes y trabajadores. De hecho, destaca que una de las herramientas con las que cuentan los establecimientos es el control de aforo y el protocolo de acción en el caso de alcanzarse los niveles marcados, lo que posibilita controlar la entrada en las puertas según van saliendo otros usuarios.

De la misma forma, han retomado la actividad los gimnasios, con una afluencia “normal, incluso un poco superior a lo previsto”, según el presidente de los Empresarios del Deporte de Valladolid (Apedeva), Francisco De la Fuente, quien asegura que ha visto a los usuarios “muy contentos e ilusionados” por poder volver a los gimnasios.

También critica los mensajes poco optimistas y nada alentadores que lanza la Junta a un sector que “no es un factor de contagio, más bien al contrario”, y advierte de que “el daño que le han hecho va a ser muy difícil subsanarlo”.

Castilla y león, pues, inicia la desescalada en estos sectores mientras que mañana se levantarán también las restricciones al deporte escolar, la cultura y las actividades extraescolares en los colegios.

Pese a ello, se mantiene el cierre perimetral de la Comunidad para la entrada y salida de personas de su territorio con las causas de excepción justificada establecidas, así como el actual toque de queda, entre las 22 horas y las seis de la mañana, la limitación a cuatro del número de personas no convivientes que pueden reunirse en espacios públicos y en domicilios, así como un tercio de aforo en lugares de culto o la limitación a diez personas en velatorios en lugares cerrados y a 15, si es al aire libre.