Zamora, capital del ajo por un día con la venta pública de 300.000 kilos

La ciudad de Zamora se ha convertido en capital del ajo por un día, como es tradicional por estas fechas, con la venta de 300.000 kilos por pare de un centenar de cultivadores en un improvisado mercado al aire libre, por segundo año consecutivo debido a la pandemia, situado junto al recinto ferial.

Este mercado sustituye a la Feria del Ajo que tradicionalmente se celebra en la avenida de las Tres Cruces durante las fiestas de San Pedro, con el objetivo de que los cultivadores puedan vender su producción familiar.El centenar de agricultores participantes procede principalmente de las comarcas zamoranas de La Guareña, Tierra del Vino y el alfoz de Toro.

El responsable del Departamento Agrario de Caja Rural de Zamora y organizador del mercado, Óscar Rojo, ha explicado que en esta edición, que se celebra con medidas de seguridad, la participación es menor porque muchos cultivadores decidieron no sembrar ajos en enero ante la incertidumbre sobre la celebración de la feria debido a la pandemia.

Se ha notado también durante los últimos días las bajas de agricultores que han comercializado su producción antes de celebrarse el mercado.Óscar Rojo ha destacado la calidad de los ajos debido a las abundantes lluvias y a que el retraso en una semana respecto a la feria tradicional de San Pedro permite que el producto esté “más hecho y más seco”.

Se venden en ristras de quince cabezas con el trenzado tradicional y a precios que varían entre dos y siete euros cada una, dependiendo de la calidad y el tamaño.Estos precios se mantienen invariables desde hace años, según han explicado desde la organización.

La feria se desarrolla durante este sábado y en horario de 10.00 a 22.00 horas en el exterior del recinto ferial Ifeza, donde tienen instalados sus puestos los 96 productores de ajos.

Entre los vendedores del mercado, en el que ha habido clientela desde primera hora de este sábado, está Alejandro González, del municipio zamorano de Fuentesaúco, en la comarca de La Guareña.

Este cultivador ha puesto a la venta mil ristras de ajos que cree que venderá durante el fin de semana en la feria, en la que comercializa una parte de su producción.Otro de los cultivadores, en este caso de Cuelgamures, localidad de la comarca de Tierra del Vino, es José Manuel Hernández, quien ha destacado la calidad de los bulbos y que los precios se mantienen similares respecto a años anteriores.

En la feria además de ajos se venden cebollas. Es el caso del agricultor Ignacio Antón, que ha llegado con 10.000 unidades de cebolla dulce desde la localidad de Cerecinos del Carrizal, en la comarca de Tierra del Pan.

El productor, que participa por primera vez en el mercado, ha explicado que la temporada de este cultivo también ha sido buena por las abundantes lluvias que han permitido a los agricultores ahorrarse el riego y el calor que ha protagonizado el final de la campaña.