Indignación

El desprecio de un vecino de la zona calcinada en Zamora a Pedro Sánchez: “¿Arreglarlo? ¿Tú?... ¿Tú, arreglar...?

El jefe del Ejecutivo solo acude a lugares preparados o actos de partido, puesto que en todos ellos recibe alguna queja, silbidos o insultos

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no pasa por su mejor momento. La derrota sin paliativos del PSOE en Andalucía, otrora bastión del socialismo, amenaza no solo a su futuro político sino al del partido del puño y la rosa, donde comienzan a estar nerviosos y ya se ven movimientos, como se ha comprobado con la dimisión de Mónica Oltra en la Comunidad Valenciana, provocada desde el PSOE valenciano. Una debacle electoral que se suma a las de Castilla y León o Madrid, y cuando en menos de un año llegan las municipales y autonómicas en la mayor parte de España.

Pero es que, además, Pedro Sánchez no puede ir a ningún sitio y estar en contacto con la gente salvo en lugares preparados o actos de partido, puesto que en todos ellos recibe alguna queja, silbidos o insultos que no son plato de buen gusto, y que tocan la moral y el orgullo del presidente del Gobierno, que no acoge con mucho agrado la crítica.

Y esto es lo que ha pasado hoy en la localidad zamorana de Otero de Bodas, uno de los lugares ubicados en plena sierra de la Culebra que se han visto gravemente afectados por el trágico incendio forestal que comenzaba hace una semana y se conseguía estabilizar el domingo tras arrasar más de 30.000 hectáreas.

Sánchez se acercaba a este municipio para conocer de cerca las consecuencias y anunciar que el Gobierno de España declarará Zona Gravemente Afectada por una Emergencia de Protección Civil, lo que se conoce como zona catastrófica, a varios lugares afectados en las últimas semanas por incendios de seis Comunidades Autónomas, entre ellos el de la Sierra de la Culebra de Zamora. Allí, el presidente avanzaba también que habrá una primera partida de urgencia de 2 millones para la sierra zamorana.

“Esa cuantía se destinará a paliar la pérdida de biodiversidad y el mazazo que desde el punto de vista social, económica y medioambiental que representa el incendio de la Sierra de la Culebra”, decía.

Tras el anuncio, el presidente se acercaba a algunos vecinos que seguían sus andanzas por la localidad para trasladarles el compromiso del Gobierno con ellos y para asegurarles que van a arreglar la tragedia ocurrida prometiendo, sobre todo a las personas más mayores, que el Ejecutivo actuará con celeridad para hacer frente a los daños causados por las llamas.

En ese momento, un lugareño indignado se dirigía a Sánchez para echarle la bronca y afearle su gestión: «Ya has quemado la Sierra de la Culebra, ahora te queda también la de la Demanda. Vete y quémala», le espetaba, mientras el presidente se acercaba después a él para transmitirle tranquilidad y asegurarle que “lo vamos a arreglar”.

Pero el vecino, lejos de cortarse o dar su asentimiento, le contestaba con una pregunta y un tono escéptico e irónico. “¿Arreglarlo tú? ¿Tú arreglar?”, decía este vecino mientras se daba la vuelta dando la espalda a Sánchez reprochando así su incapacidad de gestión y el abandono que sufre la provincia de Zamora.