Fallece el “Héroe de Tábara” que sufrió graves quemaduras en el incendio de Losacio (Zamora) cuando intentaba salvar su pueblo

Ángel Martín Azcona, popularmente conocido como “el héroe de Tábara” (Zamora), falleció en la madrugada de este martes 25 de octubre en el Hospital Río Hortega, en Valladolid, después de intentar superar durante más de tres meses las graves quemaduras sufridas cuando intentaba salvar su pueblo, durante el incendio declarado en Losacio, de este verano.

La jornada solidaria y de homenaje a Ángel Martín prevista para el próximo sábado, día 29 de octubre, en Manzanal del Barco, se ha suspendido tras su fallecimiento, según confirmaron a Ical fuentes del Ayuntamiento de esa localidad.

Con la muerte de Ángel Martín, la cifra de fallecidos en el incendio de Losacio se eleva a cuatro. El siniestro costó también la vida al brigadista Daniel Gullón, al pastor Victoriano Antón y a Eugenio Ratón.

Muchas han sido las muestras de cariño de toda la sociedad. El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, en su perfil de la red social Twitter ha lamentado “profundamente el fallecimiento de Ángel, que luchó intensamente por su vida”, y ha querido trasladar su pésame a la familia.

En la misma línea, el vicepresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, ha utilizado el mismo medio para mostrar “todo nuestro reconocimiento y respeto para Ángel, ejemplo de valentía y de amor a su pueblo. Descanse en paz”.

Por su parte, el presidente de la Diputación de Zamora, Francisco José Requejo, también ha dado su pésame y ha transmitido sus condolencias a la familia y ha abogado por trabajar todas las Administraciones unidas para que vuelva a producirse un incendio como los dos que este verano asolaron la Sierra de la Culebra de Zamora y su entorno, que calcinaron más de 56.000 hectáreas.

Tres días de Luto

El fallecimiento de Ángel Martín Ballesteros ha llevado al Ayuntamiento de Tábara a decretar tres días de luto oficial, con banderas a media asta y crespón negro en el balcón de la Casa Consistorial, según ha informado a Efe el alcalde, Antonio Juárez.

La Corporación municipal tabaresa también se ha puesto a disposición de la familia y ha decretado la suspensión de las fiestas del puente de Todos los Santos. Ángel Martín, casado y con una hija y natural de Bilbao aunque descendiente por parte materna de Tábara, llevaba décadas asentado en la localidad zamorana, donde regentaba un almacén de material de construcción en el que disponía de la maquinaria con la que salió a hacer el cortafuegos cuando se vio sorprendido por las llamas. Allegados a la familia han indicado que en la última semana Ángel Martín había sufrido un empeoramiento en su evolución, que hasta entonces había sido positiva.

El mayor incendio de la historia

El de Losacio (Zamora) fue el mayor incendio de la historia de España, desde que hay registro. Un total de 45 días lograron extinguir definitivamente un incendio, que se originó a causa de los rayos que descargaron en la zona en aquella jornada.

El siniestro costó la vida en un principio a tres personas: Daniel Gullón Varas, brigadista de una autobomba que luchaba contra las llamas el mismo día que se originó el fuego; el pastor Victoriano Antón, cuyo cadáver fue localizado al día siguiente; y Eugenio Ratón, que había resultado herido cuando huía del fuego y falleció un mes después como consecuencia de las graves quemaduras sufridas en el Hospital de Quemados de Getafe (Madrid); y desde este 25 octubre se suma a la lista Ángel Martín.

El incendio declarado en Losacio el día 17 del pasado mes de julio es, oficialmente, el mayor de Castilla y León desde que hay registros, con casi 31.500 hectáreas quemadas, según refleja el último parte emitido por la Administración autonómica. Se trata de 14.760 de arbolado, 4.601 de matorral, 6.820 hectáreas de pasto, 4.955 de terreno agrícola y 336 de otra tipología. El mismo día de si declaración la Junta lo elevó a nivel 2. Bajó a 1 por su mejoría el 22 de julio y finalmente se ha mantenido en nivel 0 desde el 3 de agosto, activo en esos días, para después estar controlado y, desde hoy, ya extinguido.