Banco de Alimentos garantiza el suministro de leche y aceite tras una aportación de 6.000 euros de la Diputación de Valladolid

El Banco de Alimentos de Valladolid garantiza el suministro de leche y aceite para los próximos meses tras una aportación de 6.000 euros realizada por la Diputación de Valladolid con lo que se palia, en parte, la reducción de un 30 por ciento de las aportaciones de leche del Fondo de Ayuda Europea para los más Necesitados (FEAD). En la actualidad, la ONG reparte 40.000 litros de leche y 5.000 de aceite cada mes, lo que supone un desembolso de 60.000 euros, entre sus 11.000 beneficiarios con escasos recursos.

El presidente de la Fundación Banco de Alimentos, Jesús Mediavilla, aseguró hoy que la única manera de garantizar la entrega de estos dos productos básicos, que también son los más demandados, es gracias a un incremento de las aportaciones económicas. No en vano, precisó, según recogió la Agencia Ical, que el FEAD ha pasado de donar al Banco de Valladolid 550.000 a 380.000 kilos al año, al reducir el número de entregas. Además, en lo que va de 2023 no ha entregado ni leche ni aceite. “La situación de este año va a ser complicada y se prevé aún más complicada para 2024”, sentenció.

La Diputación de Valladolid firmó en mayo pasado un convenio de colaboración con el Banco de Alimentos, por el que la institución provincia destinaba 75.000 euros para cubrir algunas de las necesidades de la asociación. Ahora, se incrementa en 6.000 euros. “En el momento de la firma del acuerdo ya avisé que estaba sujeto a posibles adendas”, manifestó.

Mediavilla tampoco se olvidó de otros productos como el azúcar, la legumbre, el cacao para los niños y la alimentación infantil. En este sentido, valoró que la asociación ha logrado garantizar en la cesta de los beneficiarios los 26 alimentos básicos marcados. Y eso pasa, entre otras, por que el Banco de Alimentos no cubre el cien por cien de las necesidades de una familia. “Es algo posible. Cuando hablamos de 40.000 litros de leche, entregamos cinco litros persona y mes, cuando la estadística de consumo se sitúa entre nueve y diez litros, por lo que supone la mitad”, aseveró. La ONG garantiza, al menos, un desayuno o una merienda y una comida “fuerte”, ya sea la comida o la cena. También, confío en que las familias donde van estos productos tan básicos predominen los niños, por que son los más vulnerables. “Siempre digo que no les puede faltar nada a los niños”, añadió.

El número de beneficiarios que reciben alimentos de forma regular asciende a una media de 11.000 ciudadanos, aunque, en ocasiones, se alcanzan las 12.500, que es una cifra estabilizada. El presidente del Banco de Alimentos reconoció que las personas más vulnerable, ante la situación “económica y política” actual, son también las “más olvidadas”, por lo que consideró que garantizar la alimentación es la acción social y política “más importante” en España. De ahí que hiciera un llamamiento para no olvidar a estas personas.

Antes de visitar las instalaciones ubicadas en el Polígono de Argales, agradeció la sensibilidad de la Diputación para ampliar el convenio suscrito con el Banco de Alimentos para atender las dos grandes necesidades que tiene ahora la ONG como son la leche y el aceite. También valoró la solidaridad de otras administraciones públicas, empresas y ciudadanos que, ante la “mala” situación, ayudan a la asociación. “Solo pido a la sociedad que vean la realidad por que la gente vulnerable se ve muy afectada por la subida de los precios de los alimentos y la energía, que no tiene dinero para irse ni un solo día de vacaciones”, reiteró.