Crear empleo y dinamizar la economía favoreciendo el crecimiento de las pequeñas y medianas empresas es una de las prioridades del Gobierno de Fernández Mañueco en Castilla y León, y a ello se está volcando favoreciendo la llegada de empresas ofreciendo suelo industrial asequible y beneficios fiscales, pero también echando una mano y poniendo alfombra roja a todos aquellos que quieran poner en marcha un negocio y emprender en la comunidad.

La última medida que ha puesto en marcha la Consejería de Economía y Hacienda, a través del Instituto para la Competitividad Empresarial de Castilla y León (Icecyl) es una línea de ayudas a fondo perdido dirigidas a autónomos y pymesemprendedoras para la creación de empresas o la puesta en marcha de nueva actividad, con proyectos de inversión valorados entre los 10.000 y los 150.000 euros, según informan fuentes del departamento que dirige Carlos Fernández Carriedo.

La subvención será como mínimo del 35 por ciento de la inversión aprobada, aunque se puede ver incrementada con un porcentaje adicional del cinco por ciento si existe creación de empleo especial, actuaciones contempladas en la RIS3 o proyectos medioambientales. Igualmente, se puede sumar un 10 por ciento más en función de la ubicación del proyecto, por ejemplo si está en un ámbito rural, en una zona 'amparada' por Planes Territoriales de Fomento o en la provincia de Soria.

El presupuesto de esta convocatoria, cuyo plazo de presentación de solicitudes concluye el 31 de diciembre de 2025, es de 7,5 millones de euros ampliable a 9 millones.

En los últimos tres años, entre 2022 y 2024, se han resuelto 514 expedientes vinculados a esta línea de creación de empresas de Icecyl por un importe de 24,3 millones de euros, siendo 2024 el ejercicio en el que más expedientes se resolvieron favorablemente (202), por un importe cercano a los 9 millones de euros (8.925.000).

El incremento de expedientes en estos tres años ha sido del 24,26 por ciento, con un aumento también del importe subvencionado de casi 3 millones de euros.