
Cultura
El pueblo de dos habitantes que cuenta con uno de los mejores ejemplos de arquitectura rupestre de Europa
Se trata de espacio arquitectónico que se remonta al siglo X

España nunca deja de sorprender. Son muchos los atractivos patrimoniales únicos y no tan conocido. Es el caso de un pequeño pueblo de dos habitantes que cuenta con uno de los mejores ejemplos de arquitectura rupestre de Europa. Uno de los estilos más antiguos y que han llegado a nuestros días en un estado de conservación perfecto.
Se denomina arquitectura rupestre a las construcciones excavadas o esculpidas en cuevas, grutas o paredes rocosas por las civilizaciones antiguas. Aunque en sentido estricto el término rupestre está ligado a las operaciones en piedra o roca, la arquitectura rupestre está íntimamente emparentada con aquellas arquitecturas producidas por sustracción, motivo por el cual no es infrecuente ver este término asociado a las llamadas arquitecturas excavadas, subterráneas y/o troglodíticas.
Las arquitecturas excavadas en roca han surgido en diversas partes del mundo con usos tan variados como ciudades, casas, cisternas, silos, templos o tumbas. Sus primeras manifestaciones se remontan a la prehistoria, y mantienen una producción significativa hasta la Edad Media.
La arquitectura rupestre surge por norma general en aquellas zonas donde abunda la piedra blanda, como el caso de la toba volcánica (Capadocia, en Turquía), la piedra arenisca (Petra, en Jordania, o las ciudades Anasazi en Estados Unidos), o también incluso la piedra caliza o basáltica.
En terrenos más disgregados también han surgido con frecuencia arquitecturas excavadas o enterradas, especialmente en climas muy cálidos, en busca de ambientes más frescos para vivienda, y con más frecuencia aún como almacén de alimentos. Estas últimas arquitecturas, sin embargo, en tanto que no están excavadas en roca pura y por tanto necesitan una subestructura o cualquier tipo de paramento o material separador o sustentador del terreno, es decir, en tanto que están construidas en lugar de esculpidas, ya no pertenecen estrictamente al ámbito rupestre.
También se suele englobar dentro de la arquitectura rupestre a la llamada arquitectura monolítica; término utilizado para designar aquellas obras de arquitectura resultantes del tallado de una única piedra, a modo de esculturas habitables.
Algunas obras rupestres han sido calificadas como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Entre ellas se encuentran Hal Saflieni, Cerveteri y Tarquinia, Bamiyan, Göreme, Ivanovo, Geghard Longmen, Yungang, Ajantā, Ellora o Fuerte de Samaipata (Considerado la mayor obra de arquitectura rupestre del mundo).
En Europa existen muchos tipos de esta arquitectura, pero en esta ocasión vamos a hablar de un eremitorio. ¿Pero qué es un eremitorio? Es un término que ha sido empleado para hacer alusión al lugar al que se retira y donde realiza sus actividades el eremita. Una palabra relativa a la arquitectura religiosa que provendría de la palabra eremita («ermitaño»), a su vez del griego eremites, también se define como el «sitio en que hay una o varias ermitas».
Un ejemplo antiguo de su uso se halla en «Del establecimiento de los primeros eremitorios, pretenden los antiguos cronicones arrancar la fundación de algunas iglesias de Galicia...». Pelayo Clairac señala como sus correspondientes en francés el de hermitage y en italiano eremo y romitaggio.Otra variante en castellano sería la de «ermitorio». El término, íntimamente relacionado con el de ermita (más empleado hoy día para hacer referencia a un tipo específico de edificio), en la actualidad aparece en ocasiones vinculado a la palabra «rupestre», según señala Wikipedia.
Eremitorio de San Miguel
Pues el mejor ejemplo de arquitectura rupestre es el maravilloso Eremitorio de San Miguel, situado en Presillas de Bricia, localidad de dos habitantes perteneciente a la comarca burgalesa de Las Merindades. En el centro del Alfoz de Bricia se encuentra uno de los elementos patrimoniales más curiosos y desconocidos del arte burgalés
El acceso al conjunto rupestre se realiza a través de una pista de tierra, que nace en el mismo pueblo de Presillas de Bricia, y conduce hasta una roca elevada donde se ubica el eremitorio. La llamada iglesia de San Miguel es un templo completamente excavado en la arenisca con orientación este-oeste. Consta de dos pisos. El inferior está constituido por tres naves separadas por columnas y arcos de medio punto. Cada una de ellas está coronada por un ábside, apreciándose también el altar y las hornacinas para las reliquias. A través de una escalera tallada en la roca, se accede a la planta superior donde se aprecian varias tribunas.
Debido a su amplitud y las numerosas cuevas existentes alrededor se puede pensar que fue un extenso conjunto monástico. Entre las cuevas adyacentes, cabe destacar el baptisterio, también llamado Cueva de la Vieja, de planta cuadrangular, en la que hay dos grandes huecos excavados en la roca que podrían ser piscinas bautismales.
Los especialistas no se han puesto de acuerdo sobre la datación de la obra, siendo la idea más aceptada que la concepción de este templo hay que emparentarla con el arte asturiano. La fecha de construcción más probable es el siglo X.
Las Merindades
El Eremitorio de San Miguel es uno de las principales joyas arquitectónicas de Las Merindades, pero no la única. La comarca burgalesa cuenta con una gran herencia patrimonial como testigo del intenso papel de las Merindades a lo largo de la historia.Desde el hombre del paleolítico en Ojo Guareña hasta nuestros días, distintos pueblos han legado un importante patrimonio, que podemos disfrutar al descubrir las calzadas,puentes romanos y medievales, iglesias, ermitas, monasterios de diferentes estilos, castillos, torres defensivas, palacios, casas blasonadas o conjuntos monumentales. Entre ellas destacan:
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Comenzado en el siglo XII, el carácter defensivo de esta construcción se aprecia en todo su conjunto. A él se accede por un puente levadizo sobre un foso excavado en la roca. Su defensa se basa en su estratégica ubicación: todo el perímetro tiene altos muros, rematados por un cuerpo almenado, y partiendo de una roca, la altiva torre del homenaje.
En torno al amplio patio de armas quedan restos de sus antiguas dependencias, como graneros, bodegas o estancias de servicio. Desde la parte superior de la torre del homenaje y desde los tres ventanales de sus muros, rematados por capiteles románicos, la vista de la ciudad y del entorno es excelente. Está declarado como BIC desde el año 1949.
Monasterio de San Salvador de Oña
Fundado en el año 1011 por los condes Sancho García y su mujer Urraca, el Monasterio de San Salvador fue dotado con numerosas propiedades y señoríos convirtiéndose en uno de los más influyentes del reino de Castilla. Resalta la fachada barroca del monasterio enmarcada por dos torres de la antigua fortaleza. Adosada a la pared lateral del Monasterio una larga escalinata da acceso a la Iglesia Abacial de San Salvador. Esta conserva algunos elementos de la primitiva iglesia románica del siglo XI y reúne magníficas obras de diversas épocas y estilos.
En el interior de la iglesia bajo la nave principal y una amplia bóveda octogonal, podrás descubrir magníficas obras artísticas como tallas, pinturas al fresco, retablos, un órgano barroco, una sillería del coro de nogal y una singular obra gótico mudéjar: El Primer Panteón Real de Castilla. La iglesia conserva una magnífica sacristía, una sala capitular y un claustro gótico, atribuido a Simón de Colonia.
Tobera
Se trata de uno de los parajes con más encanto de la comarca. Entre un bosque de quejigos aparecen bellas cascadas originadas por surgencias que brotan en lo alto. Muy cerca de ellas encontramos el increíble conjunto que forman las ermitas góticas del Santo Cristo y Nuestra Señora de la Hoz, del siglo XIII, y el puente medieval sobre el río Molinar.
Este modesto río atraviesa los elevados montes de los Obarenes, creando una estrecha garganta de un alto valor paisajístico. Ha sido este desfiladero importante vía de comunicación, por donde transcurría una antigua calzada romana que unía La Bureba con Orduña y los puertos del Cantábrico. Tras salir del desfiladero, el río llega a la localidad de Tobera. El Molinar debe su nombre a los molinos que aquí se encontraban y que aprovechaban la fuerza de sus aguas para funcionar. En el pueblo el río también se precipita al vacío en varias ocasiones.
Torreón de Valpuesta
Edificación más destacable de la arquitectura civil de Valpuesta. Castillo con torre del homenaje con planta cuadrada y cinco alturas. Presenta aspilleras y ventanas apuntadas. Sobre las almenas hay un tejado a cuatro aguas. Posee un recindo amurallado de planta rectangular con puerta apuntada y escudo sobre ella. La torre y la muralla están realizadas en sillar. Declarado BIC desde 1949.
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