Soria contará con un plan de lluvias para evitar que las calles se queden anegadas tras un chaparrón

El Ayuntamiento de Soria y la Empresa Mixta del Agua convocarán, en las próximas semanas, a diversos agentes en una reunión para recabar sugerencias y propuestas que se incluirán en el Plan de Lluvias, un programa que intenta evitar que las calles queden anegadas por el agua y que se repitan imágenes como las que se sucedieron, el pasado jueves, en la vecina Zaragoza con calles convertidas en ríos.

La concejala de Obras y Servicios, Ana Alegre, subrayó que en la reunión se citará a los técnicos de la empresa Mixta del Agua, responsables del Almacén Municipal y del Servicio de Limpieza, y los jefes del Servicio de Extinción de Incendios y de la Policía Local, entre otros, para abordar cómo estar preparados y contar con un dispositivo que se coordine en el caso de que se active la alerta por lluvias torrenciales.

Ana Alegre señaló que no se tienen definidas las calles que tienen más probabilidades de inundación, ya que dependa de cómo llueva, pero sí indicó que Soria cuenta con numerosas cuestas. “El agua baja por la concatedral de San Pedro cuando llueve y la zona del Duero, por lo tanto, es susceptible de quedarse anegada”, reconoció.

No obstante, en junio algunas calles del centro de la capital también quedaron totalmente inundadas, ya que se sucedieron las lluvias torrenciales y el granizo bloqueó los colectores y los imbornales fueron incapaces de absorber las escorrentías.

Es por ello, que se intentará mantener limpios los imbornales para que recojan el máximo caudal del agua, a pesar de que el granizo los puede bloquear. “El mantenimiento es fundamental”, resaltó.

Ana Alegre precisó que el cambio climático es obvio, a pesar de que algunos partidos políticos lo intenten negar, y agregó que existe una coyuntura que, indica, que las lluvias torrenciales y las olas de calor extremo, se volverán "cada vez más habituales”.

El objetivo es "buscar soluciones preventivas entre todos" para trabajar "de una forma similar a la que se da cuando se activa la alerta por nieve", agregó Alegre. La intención es reforzar "la coordinación entre todos los agentes y establecer un protocolo que incluya por ejemplo, la prohibición de aparcar durante un lapso determinado de tiempo en las calles inundables, o el levantamiento de imbornales para facilitar la circulación del agua y que, de esta forma, "el daño sea lo menor posible".

Además, se insistirá en "la importancia de la prevención", para insistir en la necesidad de "mantener alcantarillas, desagües e imbornales limpios" para evitar que entren en carga (cuando una alcantarilla, ante la lluvia torrencial, es incapaz de absorber más agua y esta brota a borbotones de la misma), informa Ical.