Desalojo polémico

Vídeo: los vecinos separan a unos hijos menores de sus padres tras un desalojo

Bloquean los accesos a la vivienda en barcelona cuando los progenitores volvieron de la comisaría de los Mossos

En la imagen, una reunión de parte de los vecinos
En la imagen, una reunión de parte de los vecinosTwitter

El pasado martes intervinieron los Mossos d’Esquadra pasa desalojar a una familia, dos padres y sus tres hijos menores de edad que ocupaban una vivienda en la calle Còdols número 27, en la zona del Gòtic de Barcelona. No obstante, otro hecho importante ocurrió tras el desalojo policial.

Los dos adultos fueron trasladados a la comisaría de los Mossos, y al salir e intentar regresar al piso descubrieron que los vecinos habían bloqueado los accesos. En el interior estaban dos de los niños.

Por decisión vecinal, los padres no pueden entrar al edificio en el que se encuentran ahora mismo sus hijos de 7 y 11 años (tienen un bebé que sí que está con ellos). La mañana de este miércoles, los menores llevan aislados de sus progenitores más de 24 horas.

Según ha explicado a la cadena Betevé Martí Cusó, portavoz de la plataforma Resistim al Gòtic, los dos niños están “con una vecina que los acompaña”. Afirma también que las entidades vecinales llamaron enseguida a los Mossos para pedir su mediación, pero que tardaron 20 horas en aparecer. Un “contraste increíble”, dice, con la rápida actuación y las cargas policiales del martes en el intento de desalojo.

Por su parte la coordinadora del área de derechos de las personas detenidas del Centre Irídia, Sònia Olivella, ha explicado en el mismo programa que jamás habían vivido una situación en la que unos vecinos actuasen de este modo, considera “muy grave” la respuesta de los Mossos, pide que se abra una investigación interna y denuncia la “inacción” de la administración.

Una cincuentena de personas se enfrentaron la noche del martes a los agentes de los Mossos desplazados al lugar. La intención de los vecinos era defender a los “okupantes” de este domicilio de la calle Còdols, según informó la Policía Autonómica.

Según fuentes policiales, varios vecinos han denunciado la ocupación, y los agentes que se ha personado en el lugar para comprobar los hechos se han encontrado la concentración, que ha actuado “con mucha agresividad y violencia” contra ellos. Los agentes requirieron el apoyo de la Guardia Urbana. Finalmente dos personas han sido denunciadas por atentado a agente de la autoridad.

Un grupo de activistas del Sindicato Vivienda del Raval se han concentrado en la puerta para evitar que la comitiva judicial pudiera entrar en el edificio. Varias furgonetas del ARRO de los Mossos se han desplegado a la zona y con el uso de casco, escudos y la defensa policial, han avanzado por la calle hasta que han apartado a los manifestantes, que estaban justo delante de la puerta de la casa donde tenía que entrar la comitiva judicial. Se han vivido momentos de tensión entre los manifestantes y el grupo de protesta.

Cuando la autoridad judicial ha podido acceder al piso, se ha hecho efectivo el desahucio. Según el autodenominado sindicato, se ha echado de casa una familia “en plena pandemia y ola de frío”. Desde este grupo contrario a los desalojos, se asegura de que el Gobierno había prohibido los desalojos de pisos durante el estado de alarma, pero que se siguen haciendo.

Han acusado directamente al conseller del Interior Miquel Sàmper y al vicepresidente Aragonès del desalojo y también de las dos muertes por frío que sufrieron dos personas sin hogar este inicio de semana en el centro de Barcelona.