El manifiesto constitucionalista coge forma en Cataluña, suma 600 adhesiones y se presentará el lunes

Empieza a caminar un nuevo movimiento constitucionalista en Cataluña a favor de una confluencia entre los partidos de derecha para plantar batalla al independentismo en las urnas. Un grupo de intelectuales y representantes de la sociedad civil han promovido un manifiesto que suma ya 600 adhesiones según han confirmado a este periódico-entre las que están, por ejemplo, Cayetana Álvarez de Toledo o ex diputados de PP y Ciudadanos en el Parlament- y que se presentará este lunes 15 de noviembre en un acto en Barcelona.

Entre los impulsores están los escritores Valentí Puig, Ferran Toutain, Xavier Pericay; el empresario Joan López Alegre, el historiador Jordi Canal, la ex eurodiputada y escritora Teresa Giménez Barbat y la citada Cayetana Álvarez de Toledo. El texto, titulado ‘Es posible vencerles en las urnas. Por una Cataluña valiente; en defensa de la legalidad, la pluralidad y la lealtad a España’, se dará a conocer el lunes a mediodía en el Colegio de Periodistas de la capital catalana.

Entre los nombres también están Yeray Mellado, ex presidente de S’ha Acabat y actual concejal de Nou Barris de Barcelona pel Canvi -la plataforma que promovió Manuel Valls antes de su marcha-, el presidente de Empresaris de Catalunya, Carlos Rivadulla, o los ex diputados de Cs, Jean Castel y Jorge Soler. También Eva Trias, empresaria del sector turístico y número dos del PP en Girona en las pasadas elecciones autonómicas del 14 de febrero.

El objetivo: vencer en las urnas

El manifiesto deja muy claro el objetivo electoral del movimiento: “Queremos, en las próximas elecciones municipales, autonómicas, generales y europeas ser parte activa de una confluencia política del mundo constitucionalista para presentar un único proyecto capaz de dar respuesta a los problemas reales de la sociedad catalana y derrotar en las urnas tanto al nacionalismo como al populismo”. “Necesitamos un proyecto político ganador. Es posible vencerles en las urnas”, zanja.

Antes, eso sí, radiografían la situación actual dejando clara su posición crítica con el PSOE y del Gobierno de Sánchez: “La política de cesiones, las mesas bilaterales de negociación y posibles amnistías blanquean a los que pretenden que miles de catalanes nos sintamos extranjeros en nuestro propio país. La equidistancia, cuando no apoyo directo al independentismo, de una parte importante de la sociedad civil y empresarial de Cataluña ha hecho posible que el independentismo se mantenga en las instituciones”.

Y en este sentido advierten que los catalanes no pueden volver a ser “moneda de cambio de intereses políticos a nivel nacional”. “Debemos ser políticamente fuertes para que la negociación de la presidencia del Gobierno o los presupuestos no queden en manos de las prioridades políticas de grupos nacionalistas y populistas, sino que podamos influir para que el gobierno active una agenda reformista”.