La CUP cerca a Borràs: “Estamos siempre al lado de la lucha contra la corrupción”

Nuevo paso hacia la caída de Laura Borràs como presidenta del Parlament. La CUP ha respondido este martes a JxCat y ha criticado que trate de equiparar el caso de Borràs, investigada por corrupción, y el cupero Pau Juvillà, condenado por un delito de desobediencia por los lazos amarillos, y ha avisado: “Estamos siempre al lado de la lucha contra la corrupción”, aunque la portavoz Laia Estrada ha evitado aclarar la posición definitiva del partido.

Los cuperos son determinantes para el futuro de Borràs. Sin su apoyo, tal y como todo apunta que ocurrirá, la presidenta del Parlament podría ser descabalgada en las próximas semanas, cuando se abra juicio oral (como todo apunta) y se aplique el artículo 25.4, que indica que la cámara catalana debe “acordar la suspensión de los derechos y deberes de los parlamentarios de forma inmediata” en caso de delitos asociados a la corrupción como los que se le imputan a Borràs. La propia dirigente maniobró hace unos meses para modificar este punto y se topó con el rechazo de todos los partidos, incluso de ERC y la CUP.

En este sentido, el órgano encargado de ejecutar la aplicación es la Mesa, compuesta por dos diputados de JxCat, dos de ERC, dos del PSC y uno de la CUP. Sin el respaldo de Esquerra y CUP, como todo apunta, se quedará sola. Borràs está a un paso de sentarse en el banquillo de los acusados por cuatro delitos de corrupción -prevaricación, fraude administrativo, malversación de caudales y falsedad en documento mercantil- por la presunta adjudicación irregular de 18 contratos a un amigo.

“Nuestro compromiso en lucha contra la represión es inequívoca, pero siempre estamos al lado de la lucha contra la corrupción”, ha subrayado Estrada, asegurando que siempre se han posicionado a favor de quien sea “perseguido” por los tribunales por reivindicaciones políticas (sea en materia de procés o de cuestiones sociales, como la vivienda), pero eso no puede englobar a delitos asociados a la corrupción.

Además de la diputada de la CUP, también el resto de partidos se han posicionado contra Borràs. La diputada del PP, Lorena Roldán, ha reclamado también que se aplique el 25.4 para que Borràs se vaya. “Pedí hace unos días que nos ahorre la vergüenza de tener una presidenta sentada en banquillo de los acusados”, ha señalado.

La portavoz del PSC, Alícia Romero, ha dicho que “el independentismo lleva más meses roto que unido” en esta legislatura, y ha criticado que Borràs pida unidad en un asunto que le afecta personalmente, y no para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.

JxCat ha mantenido, como es lógico, su defensa a Borràs. “Este no es un caso de corrupción, sino un caso de persecución política. Defendemos su presunción de inocencia”, ha dicho la portavoz de JxCat, Mònica Sales, que ha recalcado que aún no hay conversaciones con Esquerra y CUP para ver cómo afrontan esta circunstancia, aunque reclama un “frente común” y se ha mostrado “preocupada” porque el independentismo “no está todo lo unido que debería de estar”.