Sesión parlamentaria
Illa, interpelado por ERC, acepta abrir nuevas "embajadas" en el extranjero para que Cataluña afronte los aranceles de Trump
El president defiende la acción exterior del Govern y abre la puerta a fortalecer las delegaciones para hacer frente a la crisis económica causada por los aranceles de EE.UU
La entrada en vigor de una nueva ronda de aranceles por parte de Estados Unidos ha provocado una sacudida en el Parlament. La portavoz de ERC, Ester Capella, ha interpelado este martes al president de la Generalitat, Salvador Illa, para reclamar medidas contundentes que garanticen la "soberanía económica" de Cataluña ante el impacto de la guerra comercial.
Capella ha advertido de que estos aranceles no solo afectan a Europa en su conjunto, sino directamente a las empresas catalanas y a sus puestos de trabajo. En este sentido, ha criticado que la delegación del Govern en EE.UU. esté actualmente sin delegado porque Illa lo cesó y ha pedido al Ejecutivo que nombre un nuevo delegado, refuerce las delegaciones existentes y abra otras nuevas. "Esto va de soberanía", ha subrayado. "No subedite la soberanía de Cataluña al BOE o a Madrid. No vaya a remolque".
La diputada republicana ha reclamado al Govern "visión política y liderazgo" para afrontar una de las crisis económicas más importantes de los últimos años, a su juicio comparable al escenario posterior al COVID. "Ponga el país por delante", ha insistido.
Una etapa para "reforzar las delegaciones"
En su respuesta, Illa ha calificado la situación como "grave y compleja", y ha reconocido que los efectos de los aranceles son imprevisibles. El president ha defendido el plan de 1.500 millones de euros impulsado por el Govern y ha agradecido el tono constructivo de los grupos parlamentarios y de los agentes sociales.
Ante la insistencia de Capella, Illa ha abierto la puerta a fortalecer la acción exterior catalana: "Se abre una etapa en la que nos podemos plantear reforzar las delegaciones exteriores", ha afirmado. Ha añadido que el Govern no dudará en desplegar "todos los recursos que hagan falta" para proteger al tejido productivo catalán, siempre de forma complementaria a las medidas europeas y españolas y "escuchando a todos".
Los aranceles centran el debate
Los comunes también han puesto el foco en el tema de los aranceles y han exigido que cualquier ayuda pública a las empresas esté supeditada a que se mantengan los puestos de trabajo. “Trump no puede costarnos ni un solo empleo”, ha advertido el portavoz del grupo, David Cid. La formación ha pedido además al president que acelere la transición hacia las energías renovables y que impulse el pacto nacional por la industria. También han reclamado que se active la negociación para aprobar el suplemento de crédito.
Illa ha aceptado todas las peticiones planteadas por Cid, aunque no ha concretado cómo piensa abordar la ampliación de recursos de la Generalitat, una cuestión clave que deberá negociarse con los socios de gobierno. El lunes, el Govern presentó a los grupos parlamentarios su plan de respuesta catalana a los aranceles, aunque Vox y Aliança Catalana no fueron invitados a la reunión debido a su afinidad con Donald Trump.
En el Parlament, Illa ha elevado el tono contra ambas formaciones: “Ustedes defienden a Trump; son muy valientes con los más vulnerables y muy cobardes con los poderosos como Trump, que ha iniciado una guerra comercial que daña el tejido productivo y a las empresas catalanas”, ha reprochado el president durante el pleno.
Garriga, por su parte, ha defendido que el mayor arancel es la Agenda 2030, y ha instado a Illa a alejarse de las políticas intervencionistas, verdes y regulatorias de la Unión Europea y a defender a los productores catalanes y los productos catalanes.