Cataluña
Illa "prorroga" los presupuestos de ERC
El Govern prioriza aprobar directamente las cuentas de 2025 y la Generalitat terminará el curso como lo empezó. El ejecutivo ya se mueve para conseguir el apoyo de republicanos y comunes «cuanto antes, mejor» y que los nuevos presupuestos entren en vigor en enero.
Tras un aterrizaje en la Generalitat complicado en términos de calendario -muchos de los consejeros y el propio presidente, Salvador Illa, cogieron vacaciones días después de tomar posesión-, el Govern se reune esta mañana por segunda vez con el punto de mira ya en los Presupuestos de 2025, sobre los que «ya hay conversaciones en marcha». «Se negociarán directamente los del año que viene», confirman a este diario fuentes próximas al ejecutivo, quedando así pues las últimas cuentas aprobadas por ERC prorrogadas, al menos, hasta el próximo mes de enero, cuando se cumplen dos años de su entrada en vigor. El acuerdo presupuestario alcanzado en marzo entre los republicanos y el PSC, que no consiguió el apoyo de la mayoría del Parlament, quedará asimismo en papel mojado, ya que el ejecutivo descarta un modelo similar al pactado con Pere Aragonès. «Los Presupuestos tienen que negociarse de cero y adecuarse a la nueva estructura del Govern, que incorpora dos nuevas consejerías», añaden. Desde el propio PSC, además de apoyar la decisión del Govern, añaden que hay «compromisos como el porcentaje destinado a la cultura» que las nuevas cuentas incorporarán.
Por el momento, la consejera de Economía y Finanzas, Alícia Romero, presentará un informe en el Consell Executiu sobre algunos objetivos principales para los Presupuestos de 2025 y las materias que deberán negociarse tanto con los comunes como con ERC, los grupos que dieron apoyo a la investidura de Illa. Se trata de un primer boceto que también pondrá el foco en el calendario, pues el ejecutivo quiere que los nuevos Presupuestos se debatan y voten en el Parlament con suficiente margen para poderentrar en vigor automáticamente el uno de enero. «Si es en noviembre, mejor que en diciembre», apuntan desde el entorno de Palau, conscientes de que será «más fácil» negociar las cuentas con la actual dirección provisional de ERC que con la que pueda surgir del Congreso que celebran los republicanos a finales de noviembre, que muy probablemente recuperará una agenda independentista más radical para rivalizar con Junts, que también promete hacer lo propio tras su Congreso Nacional de octubre.
Los comunes serán, en cualquier caso, los primeros en sentarse propiamente a negociar con el Govern. Las exigencias de la formación de Jéssica Albiach siguen teniendo que ver con «más políticas sociales» y especialmente en relación a la vivienda, algo de lo que el nuevo ejecutivo también quiere hacer bandera, como así se exhibió en el encuentro del pasado viernes entre Illa y el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni. «No debería haber problema en este sentido», indican fuentes próximas a la formación, recordando que el escollo sí podría volver a ser el Hard Rock, el macroproyecto hotelero y de salas de juego que ya forzó el «no» de los communes a los Presupuestos votados en marzo y que forzaron la repetición electoral. «El PSC sabe cual es nuestra posición, y en el acuerdo de investidura se han comprometido a no facilitar este proyecto».