Demografía

El pueblo catalán que más población ha perdido en los últimos 10 años, según el Idescat

En la comarca de la Noguera, ha visto disminuir su población en casi un 19% desde 2019, liderando la lista de municipios más afectados por la despoblación

El envejecimiento y la despoblación son problemas similares al desempleo o el paro y los países tratan de combatirlo
La despoblación es un problema creciente en la Cataluña ruralDreamstime

En el corazón de la comarca de la Noguera, en la provincia de Lleida, se encuentra Cabanabona, un pequeño municipio catalán que, según datos recientes del Instituto de Estadística de Cataluña (Idescat), ha experimentado la mayor pérdida de población de Cataluña en los últimos cinco años.

Con una disminución del 18,67% desde 2019, pasando de 75 a 61 habitantes en 2023, Cabanabona encabeza la lista de localidades catalanas más afectadas por la despoblación.

La despoblación en cifras

El fenómeno de la despoblación no es exclusivo de Cabanabona.Según el Idescat, varios municipios catalanes han sufrido descensos significativos en su número de habitantes en el último lustro.Por ejemplo, La Quar, en la comarca del Berguedà, ha perdido un 24,53% de su población, mientras que Esterri de Cardós, en el Pallars Sobirà, ha visto una disminución del 12,68%.

Estos datos reflejan una tendencia preocupante en las zonas rurales de Cataluña, donde la falta de oportunidades laborales, la escasez de servicios básicos y el envejecimiento de la población contribuyen al éxodo de los habitantes hacia áreas urbanas.

Cabanabona: un caso emblemático

Cabanabona, con sus 61 residentes actuales, representa un ejemplo claro de los desafíos que enfrentan los pequeños municipios catalanes.La disminución de la población no solo afecta la vida cotidiana de sus habitantes, sino que también pone en riesgo la continuidad de tradiciones, la conservación del patrimonio y la viabilidad económica del municipio.

A pesar de estos desafíos, Cabanabona cuenta con un entorno natural privilegiado y un rico patrimonio cultural que podrían ser la base para iniciativas de revitalización, como el fomento del turismo rural o la atracción de nuevos residentes mediante incentivos.

Iniciativas para revertir la tendencia

Algunos municipios catalanes han implementado estrategias para combatir la despoblación.Por ejemplo, Calonge, en el Baix Empordà, ha experimentado un renacimiento gracias a la iniciativa "Poble dels Llibres", que promovió la apertura de librerías y actividades culturales, atrayendo a nuevos habitantes y visitantes.

Estas experiencias demuestran que, con políticas adecuadas y el compromiso de la comunidad, es posible revertir la tendencia de despoblación y revitalizar los municipios rurales.

La situación de Cabanabona y otros municipios similares pone de manifiesto la necesidad de abordar el fenómeno de la despoblación con políticas integrales que fomenten el desarrollo económico, mejoren los servicios y promuevan la calidad de vida en las zonas rurales.Solo así se podrá garantizar un futuro sostenible para estos pueblos y preservar la diversidad territorial y cultural de Cataluña.