Temporal

Olas de más de ocho metros y vientos de 108 kilómetros por hora

«Gloria» arrasa con paseos marítimos, desborda el río Júcar y obliga a abrir el embalse de Guadalest

El fuerte oleaje provocó olas de hasta 108 kilómetros por hora
El fuerte oleaje provocó olas de hasta 108 kilómetros por horaDomenech CastellóEFE

De récord. La borrasca Gloria que azota la Comunitat Valenciana dejó ayer un dato histórico: los 8,44 metros de altura de olas en la boya de Valencia de Puertos del Estado a causa de la mar arbolada. Esta ola supera hasta en dos metros el anterior récord, de 2017, según detalló la Agencia Estatal de Meteorología.

Además, el fuerte viento que lleva aparejado este temporal provocó rachas de hasta 108 kilómetros por hora en Barx, 100 en Miramar, 96 en Oliva, 93 en Xàbia, 87 en Xàtiva y el aeropuerto de Elche-Alicante (cerrado al tráfico aéreo desde este domingo), 78 en el aeropuerto de Valencia, 77 en Villena, 74 en Castelló de la Plana, 66 en Alicante y 64 en Valencia.

El fuerto oleaje provocó grandes daños a lo largo de todo el litoral. En la provincia de Castellón, el mar traspasó y dañó seriamente los paseos marítimos de Almenara y Moncofa y causó desperfectos en Benicarló, Peñíscola y Vinarò.

El alcalde de Moncofa, Wenceslao Alós explicado a Efe que durante todo el día la situación fue complicada ya que la fuerza del mar hizo que el agua saltase el paseo marítimo en toda la fachada litoral (de 2,5 kilómetros) y la primera línea de playa hasta llegar a las primeras calles de la zona donde se acumularon más de 50 centímetros de agua.

En Alicante, concretamente en Guardamar del Segura el potente oleaje y mar de fondo golpeó con fuerza a las viviendas situadas en la misma orilla de la playa, obligando al desalojo de una familia que fue trasladada a un hotel de la localidad. También produjo daños en el mobiliario.

En Dénia y Xàbia el mar también recuperó terreno a la arena. Un total de trece personas fueron desalojadas de sus domicilios y varias calles quedaron inundadas. El paseo del Arenal de Xàbia quedó destrozado.

El río Júcar se desbordó por su margen derecha en las inmediaciones de la escollera e inundó las zonas del Marenyet, l’Estany y el Brosquil, donde se evacuó de manera preventiva al vecindario de esta pedanía.

Además, las compuertas del pantano de Guadalest se abrieron como consecuencia de las intensas precipitaciones de la borrasca «Gloria», ya que su capacidad se encuentra por encima del 80 por ciento y la previsión es que siga lloviendo.