LGTBI

El 41 % de los alumnos ha sido testigo de discriminaciones hacia compañeros homosexuales

Los hombres son más homófobos que las mujeres, según un estudio. El 2,29 por ciento afirma que los gays son “peores que las demás”

Asistentes a una manifestación del Orgullo Gay el año pasado
Asistentes a una manifestación del Orgullo Gay el año pasadolarazon

El 41,37 por ciento de los estudiantes valencianos ha sido testigo de “algunas” o “muchas” discriminaciones hacia el alumnado homosexual de su instituto y siete de cada diez (75,17 por ciento) considera que es difícil “salir del armario” en el centro educativo, bien por la intolerancia del resto de compañeros o por desconocer la reacción que pueden tener ante ese hecho.

Estas son algunas de las conclusiones del informe “Plan Diversia: Situación previa de las aulas respecto a la homofobia”, coordinado por Fran Fernández, técnico responsable de proyectos educativos en Lambda LGTB+ por la diversidad sexual, de género y familiar, y del que son las autoras Emma Dunia Vidal Prades, Sonia Renovell-Rico y María Pilar Ortega-Leal, del Grupo de Investigación Diversidad de Florida Universitaria.

El informe recoge las contestaciones a 7.365 cuestionarios de estudiantes, mayoritariamente entre los 13 y 18 años, de institutos de la Comunitat Valenciana, la mayoría de centros públicos donde se realizan talleres y durante tres cursos escolares (de 2015 a 2018).

Según concluye, los hombres obtienen porcentajes superiores de homofobia en comparación a las mujeres, que muestran un actitud más favorable a entablar relaciones de amistad con personas con una orientación sexual diferente a la heterosexual, mientras que ellos se sienten más cómodos en una relación de amistad heterosexual.

”Se nos ha socializado de tal manera que los hombres aceptamos peor la diversidad, es un problema educacional”, asegura Fran Fernández, quien añade que las mujeres “como ya viven dobles y triples discriminaciones, empatizan más con quien es discriminado a su vez”.

Según Fernández, el hombre “también es víctima del machismo”, y agrega que esto debe servir para que se den cuenta de que el sistema heteropatriarcal y machista “les está colocando en una situación de inferioridad a la hora de gestionar sus emociones” y eso les lleva a tener actitudes homófobas.

Autopercepción de la homofobia

La gran mayoría de encuestados, el 86,54 por ciento, se considera heterosexual, un 4,82 por ciento bisexual; el 0,76 por ciento gay y el 0,69 por ciento lesbiana, señala el estudio, que indica que cerca del 10 por ciento manifiesta de forma abierta haber sentido atracción por alguna persona del mismo género y el 11,13 por ciento haber mantenido relaciones sexuales.Un 13,46 % de la muestra no se considera heterosexual –y de este porcentaje un 4,82 % dice ser bisexual y el 1,61 % “pansexual, asexual, persona, normal o no lo sé”.

Al ser preguntados por su autopercepción de la homofobia, el 79,28 por ciento del alumnado manifiesta una actitud positiva ante la orientación sexual y no se considera homófobo/a, y un 8,32 por ciento manifiesta una ‘homofobia afectiva’ (no me considero homófobo pero no me gusta ver parejas homosexuales o me dan asco los gais, lesbianas, transexuales o bisexuales).

Otro 12 por ciento no expone una visión clara frente a su postura hacia la homofobia, según el informe, que señala que en general existe confusión entre términos como sexo, género, identidad de género, orientación sexual, persona transgénera o persona transexual.

Visibilidad

A la pregunta de si conoce a personas no heterosexuales en su instituto, el 68,36 por ciento de los alumnos dice que a alguna o a bastantes y solo el 9,79 por ciento afirma de forma abierta no conocer a ninguna, y respecto a la relación que mantiene con ellas, el 57,61 dice que es igual y un 23,44 por ciento afirma tener poca o nula relación con personas no heterosexuales.

Un elevado porcentaje de alumnos, el 87,69 por ciento, asegura que sería amigo de una persona homosexual, bisexual o transexual y solo el 3,58 dice que no, la mayoría hombres (74,64), lo que pone de manifiesto una actitud homofóbica en ellos.

El informe destaca que el 62,51 por ciento de los alumnos de secundaria cree que hay compañeros y compañeras que esconden su sexualidad por miedo a la reacción del resto, y siete de cada diez (75,17 por ciento) considera difícil ‘salir del armario’ en los institutos, bien por la intolerancia del resto de compañeros (39,69 por ciento) o por el desconocimiento de la reacción que pueden tener ante este hecho (34,14 por ciento).

Homofobia conductual y cognitiva

Cuatro de cada diez alumnos (41,27 por ciento) asegura que ha presenciado alguna vez algún tipo de discriminación hacia algún compañero homosexual en el instituto, el 39,58 por ciento dice que nunca y un 16,23 por ciento señala que no se ha dado cuenta.

En relación al tipo de discriminación, el 44,58 por ciento no es capaz de identificarla, el 22,51 por ciento dice que son críticas, el 12,09 por ciento insultos o burlas cara a cara, el 11,61 por ciento insultos o burlas por la espalda, el 3,16 por ciento ciberinsultos; el 4,5 por ciento marginación y el 1,55 por ciento agresión física.

Según Fernández, en aquellos centros donde estas cuestiones no se están abordando de forma explícita y acorde a la normativa actual hay muchas mas posibilidades de que esos datos de discriminación aumenten. “Todo aquello que no dices lo estás desligitimando, lo que no se habla, no existe”.

Respecto a la percepción que tienen de las personas homosexuales, el 91 por ciento los considera iguales (que no existen diferencias con respecto a la orientación sexual de otras personas), el 2,29 por ciento de la muestra afirma que son “peores que las demás” y el 1,68 por ciento que son mejores, según el informe, que también indica que casi el 81 por ciento del alumnado afirma que su relación no cambiará nada si su mejor amigo/a le dijera que es homosexual y solo el 3,5 por ciento considera que le distanciaría.

Matrimonio igualitario y estereotipos

Preguntados por el matrimonio igualitario (entre personas no heterosexuales), al 86,46 por ciento le parece bien, el 4,28 por ciento lo considera correcto, pero no que se llame matrimonio, al 3,92 por ciento le parece mal y el 2,16 es partidario de que se casen pero no de que tengan hijos.
En este aspecto, las mujeres apoyan mayoritariamente el vocablo matrimonio y que los no heterosexuales puedan tener descendencia.
Ante afirmaciones como “las chicas que juegan el fútbol son lesbianas” o “los chicos a los que les gusta la danza son gays”, el 73,60 por ciento de los encuestados las consideran falsas, un 21,23 cree que son “ciertas en algunos casos” y un 1,38 por ciento que “siempre con ciertas”.
Por último, los alumnos consideran que la homofobia está más extendida en el mundo (el 61,51 por ciento opina así), en segundo lugar en España (53,96 por ciento) y en tercer lugar en la ciudad en la que viven (33,84 por ciento).