Fallas

Valencia le da la bienvenida a las Fallas con la Exaltación de la Fallera Mayor

El Palacio de Congresos se pone en pie para exaltar Carmen Martín Carbonell como máxima representante de la fiestas josefinas

Carmen ya tiene la banda que la acredita como Fallera Mayor de València
Carmen ya tiene la banda que la acredita como Fallera Mayor de ValènciaArmando Romero (JCF)La Razón

El Palacio de Congresos de Valencia se puso en pie en la noche de este sábado para exaltar a la Fallera Mayor de València, Carmen Martín Carbonell. Un auditorio que se llenó de solemnidad para recibir en su escenario a la máxima representante de la fiesta fallera. Bajo la atenta mirada de familiares, amigos, autoridades y las falleras mayores y presidentes de todas las comisiones de la ciudad, Carmen Martín Carbonell hacía su entrada por la pasarela del Palacio.

Uno de los momentos más esperados para ella se hacía realidad. Con la serenidad y elegancia que la caracterizan, y después de sentir los primeros compases de la Suite “Fallera Mayor de València”, empezó a recorrer paso a paso la moqueta que cobría el camino hasta la Silla de Oro. Luciendo de la forma más especial su espolín de Fallera Mayor de València, color verde, a conjunto con sus ojos y con esa preciosa sonrisa del cual pocas veces hemos podido disfrutar este año, llegaba al escenario.

Los aplausos invadían el entorno ante la emoción de Carmen. Brillaba con luz propia, como lo hacían sus manteletas de Artesanía Viana. Su traje, confeccionado por 1700, llenaba el escenario de elegancia y emociones.

Después de que el alcalde de Valencia, Joan Ribó, le impusiera a Carmen la Joya que realza la figura de la Fallera Mayor de València como la máxima representante del mundo fallero, el patio de butacas entero en pie homenajeó su Fallera Mayor con un caluroso aplauso que llenaba de felicidad el rostro de Carmen. Era momento de ocupar la Silla de Oro, lugar privilegiado donde ser exaltada como máxima representante.

“Esta noche, Valencia te regala un viaje hasta la eternidad, y este Palacio será tu estación de partida, porque la fallera mayor no va vestida con un espolín, sino que es su persona la que viste el traje y enaltece su condición. Es un cargo que cambia entre un selecto grupo de mujeres a las que rodea un aura con capacidad sanadora, a quien la banda empodera y la hace mejor persona cuanto más cerca está de la gente”.

Con esas palabras se refirió al nuevo reinado Miguel Prim, mantenedor de la Fallera Mayor de València y su Corte de Honor. “Ha llegado la hora de reinfectarnos de esta fiesta, de cambiar la piel que no nos deja ser como erámos. Progresar tiene que ser retroceder, y ganar el futuro será volver al pasado, porque ya algunos días no nos reconoce ni nuestro espejo”.