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Urbanismo

Un informe avisaba en 2019 del mal estado de la fachada del Ayuntamiento de Alicante

El 24 de octubre se desprendió parte del campanario, o torre del reloj, sin causar heridos ni muerte

La nueva portavoz del Gobierno Local de Alicante, Cristina Cutanda, junto al también portavoz, Manuel Villar, hoy en rueda de prensa La Razón

El Gobierno Local ha presentado hoy el informe del servicio de Conservación de Inmuebles en el que se da cuenta del estado de la fachada del Ayuntamiento, después de que el 24 de octubre se desprendiera parte de una cornisa del campanario, o torre del reloj, sin causar heridos ni muertos.

Y en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno Local de hoy, la nueva portavoz, Cristina Cutanda, -que sustituye a la concejal de Turismo, Ana Poquet, en el puesto- ha detallado que en 2022 se vio necesario un proyecto de rehabilitación integral del inmueble; dicho proyecto comenzó a elaborarse en 2022 pero está en proceso de supervisión por la Conselleria de Cultura.

Este trabajo se inició después de que se produjeran desde 2014 diversos desprendimientos de la fachada de la Casa Consistorial, catalogada como Bien de Interés Cultural (BIC). A pesar de las evidencias de la erosión, hasta 2019 no se planteó ejecutar el proyecto de reestructuración integral del inmueble, que todavía está en trámites. Es decir, que en 2019 ya había informe que indicaba la necesidad de rehabilitar el inmueble, tal y como ha concretado Cutanda, en respuesta a preguntas de los periodistas.

Es más, el informe especifica que había un gran deterioro en los sillares del lado derecho de la arcada de la fachada del Ayuntamiento y, a causa de ello, había habido algún desprendimiento. Construido con piedra caliza, el edificio, según la documentación aportada por el Gobierno local, necesitaba trabajos de mantenimiento y repitando.

Parte de la erosión en la fachada se debe, además, al efecto de la lluvia que cae de las gárgolas sobre la piedra.

Además de Cutanda, el también portavoz del Gobierno Local, Manuel Villar, indicó que la plaza del Ayuntamiento sigue acordonada para evitar el tránsito de personas y la circulación cortada, como medidas de seguridad, si bien las dos torres del Ayuntamiento tienen una malla protectora. No obstante, la primera o segunda semana de diciembre, según Villar, se instalará en dicha plaza el tradicional Belén Gigante, con motivo de las fechas navideñas.

A la espera de los anclajes

Precisamente por tratarse de un BIC para colocar de manera definitiva los anclajes que protejan la fachada y eviten desprendimientos, el Ayuntamiento debe contar con el visto bueno de la Conselleria de Cultura con la que, tal y como han informado hoy, se trabaja de manera coordinada desde el minuto uno del siniestro.

Una vez se proteja la fachada y se recupere la normalidad en una plaza que, en fechas navideñas, es un hervidero de actividad y de afluencia de personas, máxime con el Belén Gigante como reclamo, se procederá a la adjudicación del proyecto de reparación y consolidación de la fachada del inmueble. El proyecto como tal está en fase de tramitación; cuando tenga la aprobación de la Conselleria de Cultura, el estudio pasará de nuevo a manos del Ayuntamiento que, a su vez, adjudicará las obras de remodelación.

De ahí, y tal como informaron tanto Cutanda como Villar, que sea prematuro adelantar plazos e importes de las obras de reparación del Palacio Consistorial, que ocupa el número 1 de la plaza del Ayuntamiento y el número 1 de la calle Jorge Juan.