La segunda vida de Círculo de Lectores

La información de que la editorial Planeta va a proceder a la destrucción de las Obras Completas de Círculo de Lectores es falsa. A pesar de lo que se ha afirmado últimamente, algunas fuentes de este sello lo han desmentido de una manera categórica. «Nosotros hemos estado hablando en las últimas semanas con la Biblioteca Nacional para donarle nuestro archivo de Círculo de Lectores, que consta, aproximadamente, de unos 25.000 volúmenes. Ahora los miembros de esta institución a los que les ha encargado este asunto están en el proceso de estudiar este fondo y ver lo que les interesa de todo este importante legado material, porque, por ejemplo, pueden quedarse con uno o dos ejemplares de los títulos que componen la colección de obras completas, pero no lo harán en depósito con todas las copias. Una vez acabe este proceso y veamos qué quieren quedarse definitivamente, la idea desde un principio ha sido ceder los volúmenes a bibliotecas. Nunca hemos querido destruir nada, ni mucho menos», han informado fuentes de Planeta a este diario.

El pasado 11 de noviembre este sello editorial anunció el cierre de la estructura de Círculo de Lectores, uno de los mayores y más míticos clubes de lectura que ha habido en este país, que se fundó en el año 1962 y que durante décadas llevó la cultura a los hogares españolas, ayudando, en un momento clave de nuestro desarrollo cultural, a difundir la lectura entre toda las capas sociales, una tarea que en su momento fue recompensada con el cariño y la estima de cientos de lectores. Pero lo que se quiso también matizar es que se desmantelaba la estructura, en ningún momento el sello, como muchos creyeron en un principio. Este modelo a día de hoy, con la irrupción de las nuevas tecnologías y los cambios de negocio que se están desarrollando, estaba fuera de lugar. Durante los últimos años se ha intentado hacer cincuenta mil cosas para mejorar este modelo, pero se ha decidido cerrar la estructura comercial, no cerrar Círculo, para entrar en un proceso de la estructura futura», confirmaron fuentes de este sello a Efe cuando se hizo público este paso.

El motivo, por tanto, de haber adoptado esta decisión ha estado impuesto por la nueva realidad vigente del mercado, la deriva que ha impuesto la eclosión de internet a nivel mundial y de la clara alteración de los usos de consumo de la población, que prefiere comprar libros a través de otras plataformas. En nuestra sociedad actual, con la red y la venta «online», que te permite adquirir títulos de manera instantánea en librerías de casi todo el mundo, no tenía demasiado sentido continuar manteniendo esta infraestructura de agentes comerciales.

A pesar de la noticia de que se iba a proceder al cierra de una parte de Círculo de Lectores, y que se trasladó a través de un comunicado, no es verdad, en cambio, que la editorial vaya a proceder a la destrucción de las Obras Completas, como se ha afirmado, y que es una de las grandes empresas literarias que se ha acometido en este país. Desde la editorial Planeta se ha insistido en que «llevábamos un mes negociando con la Biblioteca Nacional cuando, de repente, nos hemos encontrado con esta información, que ha nacido claramente de un malentendido. Cada vez que dejamos de vender un libro, el departamento de derechos de autor envía una carta a los autores correspondientes para recordarles que recuperan plenamente sus derechos y que, desde ese momento, pueden pedirnos las obras físicas de que nosotros disponemos y que guardamos si así lo desean, o sino, puede que una parte de ellos se destruyan. Esto es una carta modelo que se envía siempre de forma automática, pero que no tiene razón de ser en este caso con libros que corresponden a las Obras Completas. El modelo de misiva es el mismo siempre y el error fue enviarlo, porque no tenía razón de ser».

Las Obras Completas se convirtieron enseguida en un referente para todos los españoles al reunir los principales trabajos de autores que todavía hoy son referenciales, como Franz Kafka, Günter Grass, Mario Vargas Llosa, Juan Goytisolo, Federico García Lorca, Carmen Martín Gaite y Manuel Vázquez Moltalbán, entre muchos otros. Todos ellos son escritores reconocidos que pertenecen al acerbo de la literatura mundial y cuyo valor literario está más allá de cualquier cuestionamiento. Durante todas estas décadas, Círculo de Lectores llegó a reunir a medio millón de socios, una cifra abultada, tuvo un catálogo que alcanzó los trescientos libros y llegaron a distribuir alrededor de ocho millones de ejemplares en los domicilios. Pero a lo largo de 2011 Círculo de Lectores / Galaxia Gutenberg se dividía. La primera quedaba en manos de Planeta y la segunda, la dirigiría el editor Joan Tarrida que, también, conservaría una parte de estas Obras Completas y las ha ampliado con Fernando Fernán Gómez o María Zambrano. Ahora Planeta está tratando de negociar la mejor salida para que el inmenso valor que supone el legado de todo este fondo editorial se salve y pueda consultarse todavía por todos los lectores. Los primeros que han sido informados de esta operación han sido, como no se podía esperar menos, los novelistas o sus familiares, para recoger sus deseos y proceder en conformidad de lo que ellos deseen.