Hay una pulsión, ciertamente poco contrastada, de que los jóvenes o las generaciones contemporáneas escuchan poca música clásica. Herencia de un elitismo intelectualoide que copa todos los estamentos de la cultura, esta noción no es más que la afirmación osada de quien no quiere hacer caso a los datos. Solo atendiendo a los datos públicos de Spotify, las composiciones de Ludwig van Beethoven (Bonn, 1770) llegan hasta los más de 6 millones de oyentes únicos y distintos al mes. O, por ser más concisos aún, su Sonata número 14, interpretada por el pianista Paul Lewis, registra más de 76 millones de escuchas.
En el año en el que se cumplirían 250 desde su nacimiento, el legado de Beethoven es incontestable aunque la pandemia provocada por el coronavirus haya causado la cancelación o el aplazamiento de los numerosos homenajes que se le iban a rendir por todo el mundo. No en vano, hoy mismo el director de orquesta Pablo Heras-Casado le rendirá tributo con la interpretación de su “séptima” en el Teatro Real de Madrid. Con esa vigencia, dos siglos después de su fallecimiento, es como se explica la lista de sus composiciones más escuchadas en “streaming” en la plataforma Spotify.