Cantabria

Altamira, entradas a subasta

El Consejero de Turismo de Cantabria pretende que los ciudadanos pujen por ellas, violando así el principio de acceso democrático a la cultura

Bisontes de la cueva de Altamira, conocida como la «Capilla Sixtina» del arte rupestre
Bisontes de la cueva de Altamira, conocida como la «Capilla Sixtina» del arte rupestrelarazon

El Consejero de Turismo de Cantabria pretende que los ciudadanos pujen por ellas, violando así el principio de acceso democrático a la cultura

El Gobierno de Canta-bria se ha desmarcado con una propuesta que, en principio, contraviene la política de precios públicos para todos los museos que se defiende desde el Ministerio de Cultura y, además, el principio democrático de acceso a ésta. El consejero cántabro de Turismo, Francisco Martín, que ha sido nombrado por el PRC de Miguel Ángel Revilla (un político que se ha mostrado partidario de abrir las cuevas a todo el mundo para sacar rédito económico, algo que, como dicen los científicos, supondría el deterioro irremediable de las pinturas de las cuevas), podría proponer al Patronato de Museo Nacional y Centro de Investigación Altamira, cuya próxima reunión todavía no se ha fijado, sacar a subasta unas pocas entradas al año para contemplar la cueva original. Bajo el alegato de que así se podrían traer a «personas dispuestas a pagar muchísimo dinero por entrar a la cueva original», se rompería la regla democrática de que cualquier persona, de cualquier estrato social, con dinero o sin él, pueda disfrutar de esta joya del arte rupestre.

Nefasto precedente

Además, eso obligaría a los ciudadanos a pujar por las entradas en subasta. Que sea una, o cinco o diez, resulta irrelevante, ya que la medida es una violación clara de los principios de los términos de igualdad para acceder a la cultura. Por otra parte, representaría un nefasto precedente y una demostración tangible de cómo algunos políticos están dispuestos sacar máximo beneficio del patrimonio nacional para obtener ingresos sin reparar en las consecuencias. Francisco Martín, que ha hecho estas declaraciones a «El Diario Montañés», también señaló que en el siglo XXI «hay mil soluciones técnicas para entrar a la cueva sin afectar al ambiente interior» (soluciones que, por lo visto, los expertos y científicos no deben conocer). Según han precisado a Ep la Consejería de Turismo de Cantabria, la propuesta del consejero es «una idea personal» que deberá debatir el Gobierno de coalición PRC-PSOE para «ponerse de acuerdo». De momento, ya se ha pronunciado en sentido contrario el socialista Ramón Ruiz, que ha abogado por que las instalaciones de Altamira sean «lo más abiertas posibles a todo el mundo» y que este museo sea «democrático», mientras Podemos ha calificado esta iniciativa de «gran retroceso» porque supondría «instaurar una categoría de desigualdad diametralmente opuesta» a los valores que implica el título de Patrimonio de la Humanidad.