Videos

Ava Gardner, de sueños de infancia a mito del cine

Ava Gardner fue considerada "el animal más bello del mundo", y así se titula una muestra con más de 120 piezas que mezcla las facetas personal y profesional de la actriz e incluye alguna de las cartas en las que cuando aún era desconocida soñaba con ser estrella del celuloide.

La historia de Ava Gardner salió de un escaparate, el del neoyorquino estudio de fotografía en el que su cuñado colgó el retrato de una joven de 16 años cuya autenticidad y belleza conquistó a Metro Goldwin Mayer.

Esa imagen que supuso el nacimiento de un mito del celuloide luce desde hoy en la exposición con la que el Festival de Cine Clásico Retroback de Granada, que dedica su sexta edición a la actriz, le rinde tributo con los fondos cedidos por el Museo Ava Gardner de Carolina del Norte (EE.UU), y que por primera vez se pueden ver en España.

"Yo siempre quise ser una estrella de cine". Así de claro lo relataba una Ava de 13 años a una de sus amigas en una carta de tres folios recuperada para la muestra.

Años antes, como cualquier alumno, posaba para la familia tras representar a una rosa en una actuación infantil de su colegio aferrada ya al sueño de brillar en el celuloide y, seguramente, sin saber que lo lograría.

La muestra recorre sus grandes películas con los carteles originales y ofrece manuscritos, letras de las bandas sonoras de sus filmes, guiones y otros pequeños tesoros con los que recorrer su historia cinematográfica.

La Sala Zaida de Granada acoge además la cara más personal de la actriz que enamoró desde la pantalla en películas como "55 días en Pekín", "Mogambo"o "La noche de la iguana"y exhibe algunos de sus objetos personales, como el collar que lució en el estreno de "Las nieves del kilimanjaro"(1952).

El director del Museo Ava Gadner, Todd Johnson, ha destacado la pasión que sintió la actriz por España durante los años en los que fijó en el país su residencia y ha recordado las escapadas por Andalucía, especialmente en Sevilla y Granada, para saborear el flamenco.

Gardner se declaró enamorada del barrio granadino del Sacromonte, donde protagonizó más de una trasnochada y degustó platos típicos en bares aún emblemáticos de la ciudad, y quizá para recorrer sus calles compró algunos de los zapatos que pueden verse en la muestra, de tacón escaso y alta etiqueta.

Aunque la muestra ofrece a una Ava Gardner más cercana y desmitificada a través de algunas de sus pertenencias, la que nace diva lo es cada hora del día y así se percibe en su bolso de Gucci o su bolso para cosméticos de firma francesa y diseño poco menos que nupcial en dorado y negro.

Entre los atuendos de la exposición, destaca la chaqueta de cachemir ribeteada que lució en "El gran pecado", un provocativo vestido rojo y negro de la cinta "Fiesta"grabada en España o un conjunto anaranjado de la misma película.

El paseo por el universo personal de Gardner ofrece también un traje de época en rosa palo de la película "Magnolia", que jamás se vio porque esa escena fue eliminada, o un largo y entallado vestido negro y largo de su colección personal.