Conciertos

Empacho de retromanía ibérica

La cultura popular siempre regresa al pasado: este fin de semana dos festivales recuerdan dos décadas distintas: «Una noche en la Movida» celebra los 80, mientras «Love the 90’s» vive de «cantaditas».

Nacho García Vega, fundador de Nacha Pop, participa el lunes en Una noche en la Movida
Nacho García Vega, fundador de Nacha Pop, participa el lunes en Una noche en la Movidalarazon

La cultura popular siempre regresa al pasado: este fin de semana dos festivales recuerdan dos décadas distintas: «Una noche en la Movida» celebra los 80, mientras «Love the 90’s» vive de «cantaditas».

Iba a suceder. Los ochenta es la década interminable para la música en España. Los grupos de la Movida siguen resurgiendo de las cenizas, publicando fondo de armario o reuniones más o menos gaseosas. Tanto, que están bajo el «efecto cuéntame»: la nostalgia ha alcanzado el presente o, en este caso, la siguiente década en ponerse a tiro de efeméride. Sí, los 90 están de moda otra vez entre los diseñadores de alta costura y también, según parece, en la pista de baile. Así lo enunció Simon Reynolds en el ensayo «Retromanía» y así se explica que este fin de semana casi colisionen dos eventos de gran aforo en el WiZink Center de Madrid. «Love the 90’s» pondrá a bailar al personal a base de canciones que son monumentos al placer culpable: «Saturday Night» o «All That She Wants» –que, por cierto, Russian Red versiona en su nuevo disco–, y el lunes «Una noche en la Movida» reúne a Nacha Pop, The Stranglers y Echo & The Bunnymen para conmemorar los tiempos de Rockola, donde los tres actuaron. La nostalgia vende porque lo recubre todo de un blando recuerdo. En tiempos en los que sólo podemos sospechar del futuro o directamente temerlo, el pasado se erige como una patria emocional en la que sentirnos seguros.

Mañana, más de 15.000 personas llenarán el pabellón para celebrar los años de la electrónica cantada de Rebeca, Chimo Bayo, 2 Unlimited y Ace of Base. La multitud asistirá al evento con un noble propósito adicional: batir el récord Guiness de personas bailando el «Saturday Night» de Whigfield (que, recuerden, tenía una coreografía elaborada estilo «La Macarena») un tema que es un himno a la inocencia. En una velada conducida por el locutor radiofónico Fernandisco, además de los citados, actuarán The Jumper Brothers, Technotronic, Snap!, OBK, Ice M, Corona, Vengaboys, Gala y Sensity World. Artistas «one hit wonder» de cuando la radio dominaba el mundo musical. Temas que avasallaron en su momento a lomos de cajas de rimo y estribillos cantados que dieron lugar a un género: las «cantaditas» estilo «Duro de pelar» y otras ambrosías que dominaron las pistas de baile y las listas de éxitos a golpe de negocio millonario. De sus efectos en el ecosistema musical se ha hablado mucho. La proliferación de estos hits y del fenómeno «megamix» subsiguiente arrasaron con cualquier posibilidad de estilo alternativo y por lo tanto de industria. Incluso aniquilaron la escena electrónica incipiente que era su caldo de cultivo. De las consecuencias de este fenómeno en el gusto colectivo no hablaremos en esta pieza, basta decir que la siguiente ola comparable en magnitud fue la de «Operación Triunfo». Las entradas para el evento en Madrid se agotaron en menos de una semana, y los organizadores han replicado la idea en otras ciudades, aunque con variaciones en el cartel: serán en Barcelona (Palau Sant Jordi, 7 de julio), Valencia, (Ciudad de las Artes y las Ciencias, 3 de junio) y Mallorca (Port Adriano, 3 de agosto).

A continuación, «Una noche en la Movida» abrirá sus puertas el lunes, día de San Isidro, a las 18:30h con la sesión de Magin & Pepo, DJ originales de Rockola que pincharán música internacional y nacional de aquellos años (The Psychedelic Furs, Lords of the New Church, Siouxsie, The Chameleons, Paralisis Permanente, Glutamato Ye Ye...), para amenizar la espera entre las actuaciones de las cinco bandas que forman el cartel: Los Pistones, Nacha Pop, Immaculate Fools, The Stranglers y Echo & The Bunnymen. El presentador de la velada, cuyas entradas cuestan 30 euros, será Jesús Ordovás.

Inquilinos de Rockola

Entre los artistas, Los Pistones son un grupo madrileño formado en 1980 que, tras cuatro discos y muchos vaivenes se disolvieron sin hacer ruido, ya en los 90. En 2008 volvieron a los escenarios. The Stranglers tuvieron presencia en Madrid, con dos conciertos (78 y 83), el segundo de ellos en RockOla. Mientras, Inmaculate Fools se formaron en 1984 y tras seis álbumes y sucesivas giras, llegó el final de la primera etapa. Más tarde, Kevin Weatherill refundó la banda con músicos de Galicia, donde reside. De Nacha Pop poco se puede decir a estas alturas. «Chica de ayer» o «Lucha de gigantes» son dos himnos de la música de todas las épocas. Tras varios años de duelo por la muerte de Antonio Vega, su primo y cofundador del grupo, Nacho García Vega ha editado una nueva referencia «Efecto inmediato») con algunos temas que llgó a escuchar Antonio. Echo & The Bunnymen tuvieron contacto con Madrid, en el año 82 (concretamente el 29 de julio, ver imagen), en el templo de la Movida, Rockola. Para completar el pedigrí como referente de esa época, pueden ver en internet su actuación en «La Edad de Oro» dos años después.

La nostalgia, como todo lo demás, es un negocio. En las últimas fechas, al calor de estos dos eventos se han editado la enésima compilación de Nacha Pop (Warner) que se presenta como «Colección definitiva» bajo el subtítulo «Chica de ayer y otras canciones que consiguen que te pueda amar», y un recopilatorio oficial del festival, «Love the 90’s» (Universal). A este respecto cabe destacar que el nombre de Rockola ha sido utilizado para rebautizar una sala de Madrid, convertida en templo de nostalgia permanente pero con poco que ver con el espíritu original, el mismo largo trayecto que hay de un local de barrio a la bastante odiosa calle José Abascal.