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Arte

El Prado prestará 18 obras maestras en una gira nacional

La pinacoteca ha retomado el proyecto de ceder temporalmente obras a comunidades autónomas y desmiente la idea de «descentralización» que algunos ven en esta iniciativa

"Riña de gatos", de Goya, una de las obras que se prestarán
"Riña de gatos", de Goya, una de las obras que se prestaránMuseo del Prado

En 2019, como parte del programa diseñado para conmemorar su bicentenario, el Museo del Prado impulsó una iniciativa inédita, «De gira por España», que extendió durante un año. Consistía en el préstamo temporal durante un mes de una obra a los principales museos del país. El propósito era aproximar los tesoros que alberga a los españoles que viven fuera de Madrid y subrayar de paso su vocación de institución cultural nacional.

Solo unos pocos meses antes, había prosperado la moción de censura contra Mariano Rajoy y, por tanto, hacía pocos meses que Pedro Sánchez había llegado a La Moncloa. No había tiempo suficiente para que nadie hubiera abundado en discursos posteriores. Esa nueva posición política que hace referencia a la descentralización de las colecciones que trajo consigo Miquel Iceta cuando le entregaron la cartera del Ministerio de Cultura, y la reciente tesis de la descolonización, que ahora ha inaugurado Ernest Urtasun, su sucesor al frente de este Ministerio.

Coincidiendo con los cien años de Telefónica, la pinacoteca, en colaboración con esta empresa, han decidido recuperar aquella primera idea y volver a reactivarla. A partir de este próximo mes de abril y hasta principios de diciembre, bajo el nombre «El arte que conecta», el Museo del Prado, con apoyo de esta compañía, prestará 18 obras maestras a 18 museos de distintas comunidades y provincias. Estos cuadros se sumarían al llamado Prado extendido, un conjunto de 3.000 depósitos que este museo tiene repartidos en distintos lugares de España y que asegura su presencia en el resto del territorio.

En esta ocasión, los lienzos seleccionados son muy reconocidos, «obras maestras», en palabras de Miguel Falomir, director de El Prado, y suelen estar habitualmente colgados en salas. Pertenecen a maestros de indiscutible altura y de reconocido nombre, como son Velázquez, José de Ribera, Francisco de Goya, Rubens, Jan Brueghel el Viejo, Murillo, Madrazo, Anton van Dyck, Claudio de Lorena o Nicolas Poussin, entre otros. Se prestarán, como se resaltó en una rueda de Prensa, sobre todo a emplazamientos que, por lo general, están más alejados de los principales circuitos artísticos y que no tienen un acceso habitual a exposiciones o al arte. «Hemos intentado que no vayan a las grandes ciudades de nuestros territorios, donde ya existe una mayor oferta artística, y llegar, por el contrario, a aquellas otras poblaciones que no tienen la suerte de tener un acceso mucho más frecuente con obras de arte de esta envergadura», comento Miguel Falomir.

"Ni descolonizar ni descentralizar. Esto no tiene nada que ver con eso"

Miguel Falomir

Una selección de sedes, como también se ha repetido, que es todo un muestrario de museos que existen en nuestro país. Aquí habrá museos provinciales, autonómicos y privados. Van desde el Museo Nacional de Arqueología subacuática, ARQVA, en Murcia hasta el Museo Nacional de Arte Romano de Mérida o el Centro Niemeyer de Avilés, el Museo Etnográfico de Castilla y León de Zamora, pasando por el Museo Vivanco de la Cultura del Vino que hay en Briones, La Rioja. «Se ha procurado que la temática de esos cuadros tengan alguna relación con el destino donde vana ser expuestos, pero no siempre se ha podido hacer eso».

Interpretaciones

Durante la explicación de este nuevo proyecto, algunos se preguntaron si tenían algo que ver con las intenciones que han manifestado Iceta y Urtasun de descentralizar el Museo del Prado, al igual que otras colecciones de otros museos. Desde esta institución se ha negado de manera categórica y se ha apelado a los antecedentes que existían antes de la llegada de estos ministros para remarcar que la única intención que hay detrás de este plan es difundir el valor artístico que custodia la pinacoteca. Algunos también lo han visto como una propuesta del Prado para tomar la iniciativa y demostrar que ellos ya participan de esta clase de proyectos.

Pero esta interpretación también ha sido negada por el museo, que ha reiterado que no hay nada detrás de eso y que se ha esforzado por señalar que la idea de «El arte conecta» está alejada de todo eso. «No tiene nada que ver. Esto ya estaba hace cinco años y se hizo de manera independiente a eso. Esta propuesta es solo nuestra», aclaró Miguel Falomir. «Ni descolonizar ni descentralizar –aseguró de manera severa–. Esto no tiene nada que ver con eso. Es una actividad más enmarcada en El Prado, con independencia del ministro que haya», aseveró el director.

Él mismo adelantó que esta iniciativa no responde ante terceros y que salió del propio museo. Han sido ellos los que se han puesto en contacto con todos estos centros repartidos en distintas partes del territorio español para ofrecerles la posibilidad de exhibir por un tiempo limitado una obra del Prado. Reiteró que todas aceptaron enseguida y que ninguna de estas localidades puso reparos o impedimentos. De hecho, en algunos casos se les ofreció la posibilidad de elegir entre dos óleos para que esa pieza se ajustara mejor a la identidad de cada región. Por este motivo, Ribera va a Xátiva, por mencionar un caso.

A la cuestión de si había peticiones para solicitar obras de más alto rango, Falomir atajó diciendo que no y aprovechó para señalar que, aunque no existe una lista de obras del Museo del Prado que no pueden prestarse jamás, resulta evidente cuáles son, y nombró, entre otros, las tablas de Fra Angelico, «Las lanzas», «Las Meninas», «Los fusilamientos» de Goya, El Bosco o «El descendimiento» de Rogier van der Weyden, entre otros.

Con esta iniciativa, que contará con un respaldo económico de unos 300.000 euros, se trata, como ha dicho, Falomir de «simbolizar nuestra vocación nacional y ser un verdadero valor cultural para todos los españoles». De hecho, como apuntó, es consciente de que «El museo del Prado es una de las instituciones más queridas por los españoles. La consideran de las más importantes y de las más queridas. Con esto queremos estrechar esa relación afectiva».