Un joven colombiano, el pasajero 1.000 millones de Barajas

El colombiano Alonso Fernández Ortiz, de 30 años, llegó hoy a Madrid en un vuelo de Iberia "muy feliz"por convertirse en el pasajero 1.000 millones del aeropuerto de Barajas, una cifra que coincide con el 80 aniversario de la apertura al tráfico aéreo comercial del aeropuerto.

Alonso Fernández, que viajó con una amiga, reconoció que la compañía Iberia le comunicó un día antes de emprender el viaje desde Bogotá que sería el afortunado y que le iban a hacer un recibimiento especial, aunque -dijo- "no esperaba esto de tanta gente y tanta cámara".

Es la primera vez que este joven estudiante de ingeniería electrónica viaja a España, aunque sólo tiene previsto permanecer en Madrid un día, que aprovechará para visitar el Santiago Bernabeu, antes de continuar mañana viaje a Polonia, donde "cursará una maestría"de su especialidad.

A pie de avión, Alonso Fernández fue recibido por la directora del aeropuerto madrileño, Elena Mayoral, que le entregó una "gran tarjeta"que, bajo el lema "Soy el pasajero 1.000 millones", le da derecho a usar las Salas Vip de Aena de los aeropuertos españoles durante un año.

En su discurso de bienvenida al joven colombiano, Mayoral repasó la historia del aeropuerto de Barajas desde que el 15 de mayo de 1933 aterrizó el primer vuelo comercial: un avión trimotor Fokker VII de la compañía LAPE (futura Iberia), con capacidad para 8 pasajeros y dos tripulantes.

La responsable de Barajas expresó su esperanza de que no hagan falta otros 80 años para contabilizar otros 1.000 millones de pasajeros "si no que se alcance antes".

El aeropuerto que ha recibido hoy a Alonso Fernández es muy distinto del que acogió el aterrizaje del citado Fokker VII, ya que no tenía ni edificio terminal ni pistas asfaltadas en 1933, año en el que llegaron 378 vuelos y 2.873 pasajeros.

Una cifra que dista mucho de los 45 millones de pasajeros y cerca de 375.000 operaciones que realizó en 2012, por lo que se convirtió en el quinto aeropuerto europeo y el 19 del mundo por volumen de tráfico.

En la actualidad Barajas acoge a cerca de 80 compañías aéreas que vuelan regularmente a 179 destinos en 65 países de cuatro continentes.

Según los últimos datos del Barómetro de Economía del Ayuntamiento de Madrid, el aeropuerto madrileño genera 15.178 millones de euros de Valor Añadido Bruto anual y 305.000 puestos de trabajo en toda España, de los que sólo 3.073 millones y 55.347 empleos (el 20,24 % y el 18,12%, respectivamente) corresponden a Madrid.

Mayoral explicó que la primera gran transformación de Barajas se realizó en los años 50, cuando se superó el medio millón de viajeros, despegó el primer Superconstelation con destino a Nueva York y la creciente demanda obligó a construir la terminal nacional, hoy conocida como terminal 2.

Al traspasar en los años 60 la cifra de un millón de viajeros anuales y con la llegada de los grandes reactores, se construyeron dos grandes pistas cruzadas, se le bautizó oficialmente como "Aeropuerto de Madrid-Barajas"y se iniciaron las obras de ampliación de la primera pista, hasta los 4,100 metros, que la convertiría en la más larga de Europa.

Los 70 estuvieron marcados por la apertura del Puente Aéreo y la construcción de una nueva terminal para vuelos internacionales, mientras que el Mundial de Fútbol de 1982 provocó una remodelación de las instalaciones y el gran aumento de viajeros de los años 90, con más de 15 millones pasajeros al año, determinó la puesta en marcha de una nueva ampliación, conocida como Plan Barajas.

De ahí saldrían las actuales terminales 4 su edificio satélite y dos nuevas pistas de vuelo.