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Atletismo

Jorge Ureña: de una lesión a su tercera medalla seguida en heptatlón

El atleta alicantino no ha podido prepararse en condiciones, pero fue plata en el Europeo bajo techo de Torun, lo mismo que hace cuatro años. Hace dos, ganó el oro

Jorge Ureña, con la bandera de España tras su segundo puesto en heptatlón en el Europeo "indoor"
Jorge Ureña, con la bandera de España tras su segundo puesto en heptatlón en el Europeo "indoor"La Razón

Fue la pértiga, por la mañana, la que terminó de definir cómo iba a quedar la lucha por las medallas: el francés Kevin Mayer, disparado a por el oro sin discusión, como se preveía. El suizo Simon Ehammer, que iba segundo, descartado de todo por sus tres nulos sobre 4,50. No hay posibilidad de recuperar eso. Y el alicante Jorge Ureña asomó la cabeza por allí: superó el listó en 4,90 y se puso segundo, aunque por detrás le pisaba los talones el polaco Pawel Wiesiolek haciendo la mejor marca de su vida (5,20). Se quedó a 25 puntos del español, a un suspiro a falta sólo de los 1.000 metros: un cara a cara con apenas dos segundos de margen para Ureña...

Atrás habían quedado un sábado que empezó regular con los 60 lisos y la longitud, pero en los que Jorge se recuperó con el peso (14,57) y la altura (2,10), acercándose a sus mejores registros para meterse en la lucha por los metales, que confirmó en los 60 vallas y la pértiga. Las dudas también quedaban atrás. El valenciano, defensor del título y plata hace cuatro años, llegaba al Europeo de Torun sin saber a ciencia cierta cómo estaba, aunque se sentía bien, pero sin la preparación ideal. Porque al 2020 de la pandemia le siguió un comienzo de 2021 con problemas de lesiones en los isquiotibiales y hasta hace una semana no pudo entrenarse de verdad.

Se demostró que estaba bien antes y en esos 1.000 metros tuvo la situación bajo control siempre. Se trataba de vigilar a Wiesiolek de cerca. Lo hizo desde el principio, pegado a la cuerda, dos puestos por detrás, pero en todo momento cerca de él. Tenían una marca parecida, pero el español este año, por la lesión citada, no había corrido un mil. Eran cinco vueltas a la pista y el polaco nunca se alejó del alicantino, que apretó los dientes en la última recta incluso para adelantarlo. Llegaba con lo justo, pero su cabeza es una calculadora. Atravesó la meta y buscó el suelo. El descanso, por fin. Un poco de aire para levantarse y levantar la bandera de España. Plata en heptatlón por detrás de Kevin Mayer para sumar una racha espectacular en las últimas tres ediciones: plata, oro, plata... El súper atleta español lo volvió a hacer.