Tenis

Nadal se serena y remonta a Ivashka en su estreno en el Conde de Godó

El bielorruso ganó el primer set por 6-3, pero el español reaccionó con un 6-2 y 6-4

Nadal da un golpe de derecha durante su partido contra el bielorruso Ilya Ivashka
Nadal da un golpe de derecha durante su partido contra el bielorruso Ilya IvashkaJoan MonfortAgencia AP

Los mismos problemas que Rafa Nadal había detectado Rafa Nadal en Montecarlo después de ser eliminado por Rublev los siguió teniendo en su estreno en el Open Banc Sabadell-Trofeo Conde de Godó, en Barcelona. Su saque no iba y a partir de ahí todo es más complicado: cuesta dominar, se golpea con más miedo, se pierde la confianza. El bielorruso Ilya Ivashka, tenista de 27 años y 111 del mundo, con problemas de lesiones en su carrera, ganó el sorteo y eligió restar. Y ante ese saque del español, logró un break. Pero con eso, claro, no vale. Era sólo el principio. Lo siguiente fue golpear la pelota con el alma, asumiendo riesgos ante un oponente que no se parecía a sí mismo. Desconocido Nadal, con fallos que no suele tener, sin mandar, su rival le podía, le desbordaba, y cerró el set con una segunda rotura por 6-3, aunque después llegaría la remontada con el 6-2 y 6-4 del zurdo.

Porque Nadal es el rey de la tierra batida, tampoco hay que olvidar eso, y en la pista en la que jugó ha ganado el torneo barcelonés 11 veces. Se las ha visto de todos los colores ahí. En este estreno tocaba sufrir, y supo hacerlo. Suele saber hacerlo. El segundo parcial lo rompió pronto, con más primeros en juego y ante un oponente al que le costó asimilar esa ventaja que había tenido ante una leyenda como Nadal. Pero no había dicho su última palabra Ivashka. Tampoco es un novato. No se quebró del todo y al comienzo del tercer set lo siguió poniendo duro y continuó golpeando fuerte y peligroso. Pero las dudas de Nadal iban a menos y más cómodo en sus juegos de saque, aprovechó el único momento de bajón de su rival para conseguir una rotura en blanco y tenerlo más fácil a partir de ahí.

Con un saque a la “t” y una derecha paralela muy ajustadita cerró el encuentro el balear y sacó el puño y pegó un salto. Ganar fue una liberación. Ahora en segunda ronda le espera el vencedor del Nishikori-Garín.