Boxeo

Maravilla Martínez, el campeón que no quiere apagarse

Derrotó a Macauly McGowan en el Wizink Center a los puntos y está más cerca de pelear por el Mundial

Maravilla Martínez celebra su victoria
Maravilla Martínez celebra su victoriaMaravillabox

Maravilla Martínez dejó lo mejor para el final, un golpe de izquierda que mandó a su rival, el británico Macauly McGowan, a pensar durante unos segundos con la rodilla en la lona. Se levantó antes de que el árbitro completara la cuenta de 10 y no hubo tiempo para más. Sonó la campana y a los dos púgiles sólo les quedaba esperar las decisiones de los jueces.

No había dudas. Ya en el séptimo asalto Sergio había tirado a su rival, que tuvo que soportar la primera cuenta de los jueces. Las cartulinas reconocieron la superioridad del argentino y le dieron vencedor por decisión unánime (99-89, 98-90 y 99-89),

A Maravilla le pesa la historia, pero le sigue pesando también la mano. A punto de cumplir 47 años, está empeñado en ser campeón del mundo, peleando contra la edad, la inactividad y esa rodilla que pudo haberle costado la vida. Sigue manteniendo las señas de identidad de cuando era el tercer mejor boxeador del mundo en la clasificación libra por libra: la guardia baja esperando a enganchar un golpe que lastime de verdad al rival y el cuerpo exprimido al máximo, sin ninguna dificultad para dar el peso.

Aunque el comienzo no pareció bueno. En el primer golpe que intentó lanzar resbaló y se fue al suelo. Pero Maravilla mandó desde el principio en la pelea, aunque McGowan se rebeló durante algunos instantes en los que llegó a ponerle contra las cuerdas.

En la segunda mitad de la pelea la superioridad se hizo evidente. La preparación física de Maravilla Martínez es impecable y en los últimos asaltos sólo se podía imaginar un final anticipado si el argentino soltaba la mano. Pudo haber llegado en el noveno asalto, pero McGowan resistió la mano lanzada por Sergio.

Maravilla esperó al final para volver a lanzar su mano, para reflejar que es algo más que un boxeador del pasado y que sigue mirando al futuro con ilusión. Después de conocer la decisión de los jueces agarró el micrófono para hacer una promesa: “Amigos hasta el Mundial no paro, coño”, dijo después de pedir un aplauso para su rival, 20 años menor que él. “Casi 21″ decía Sergio, que emplazó a los aficionados a volver a verlo el día 28 de mayo.

El primer paso para el Mundial ya está dado. El viernes, Maravilla se levantará con la satisfacción del deber cumplido y por la tarde se irá al teatro, a representar la última función de Bengala.