Opinión

El Atlético, puerta grande o enfermería

El físico y la fragilidad atrás del Atlético son inquietantes ante lo que se avecina

El Atlético se despidió de la Supercopa en semifinales
El Atlético se despidió de la Supercopa en semifinalesAgencia EFE

El Atlético se volvió de la Supercopa de Arabia antes de tiempo al perder el primero de los tres partidos pendientes frente al Real Madrid. A pesar de jugarse fuera de nuestras fronteras, tanto el equipo blanco como el Barça, se sienten como en casa porque son los únicos que cuentan con el apoyo de la grada. Los otros dos rivales de turno, los que toquen cada año, son meros comparsas, unos simples invitados que ejercen de meritorios «sparrings» para poder ofrecer a los jeques en la final el partido que han comprado a precio de oro. Es más que criticable que todos los equipos de la Liga hayan comprado semejante farsa de torneo a cambio de unos euros. Simeone tiro de ironía en la conferencia de prensa tras la derrota, aunque sus quejas caerán en saco roto.

Bien es verdad que el Atlético tiene mayores problemas que ese y que en Riad quedaron en evidencia algunas de sus carencias. La primera es el estado físico del equipo, que se desplomó y no es la primera vez que sucede. No es que se le hiciera larga la prórroga, es que se le hicieron eternos 90 minutos de partido. Los del Cholo fueron competitivos, mejores que su rival en varios momentos, hasta que a falta de un cuarto de hora ya se suplicaba por llegar a los penaltis por falta de piernas. Es cierto que las lesiones han castigado el centro del campo (Barrios o Lemar) y que el club se equivocó no fichando en su momento un jugador para competir con Koke en la posición de «5», pero la preparación física sigue dejando mucho, demasiado, que desear.

La otra parte preocupante es la falta de contundencia defensiva. Giménez, probablemente por falta de continuidad debido a sus continuas lesiones, ha perdido velocidad y confianza, y Savic ya no está para jugar en este equipo. El montenegrino ha sido un buen central, pero este Atlético ya le queda grande para partidos de entidad. Lo ha visto todo el mundo menos Simeone, que esperemos haya abierto los ojos de cara a los próximos envites. El jueves hay revancha, esta vez en el Metropolitano y el Atlético se juega buena parte de la temporada.