Entrevista
Chus Mateo: "Aquí no hay ''haters'' de la selección y ese es un punto de partida magnífico"
El nuevo seleccionador de baloncesto se confiesa «ansioso» porque el balón empiece a botar y habla sobre España, su primera lista, los Hernangómez, los NBA, el Madrid, Scariolo, Laso, el ajedrez, la cerveza...
De Bargas (Toledo), la localidad en la que reside Chus Mateo (23-1-1969, Madrid) a la sede de LA RAZÓN, hora y media de trayecto. Los atascos no han restado al nuevo seleccionador las ganas de charla a una semana de dar su primera lista para los partidos de las Ventanas FIBA ante Dinamarca (día 27) y Georgia (día 30).
¿Qué balance hace de su primer mes y medio en el cargo?
Lo primero es que estoy súper ilusionado con muchísimas ganas de comenzar, ansioso para que la pelota empiece a botar. Estoy analizando un poquito cómo podemos afrontar este corto plazo con las Ventanas que es un momento muy importante para para poder clasificarnos para el Mundial de Qatar 2027. Ver qué jugadores son seleccionables sabiendo que el abanico se reduce al no poder contar con los Euroliga, los NBA y los NCAA. Y también viajando mucho, hablando con muchos jugadores y haciéndoles ver que su seleccionador esta muy cerca de ellos.
Por supuesto que no hay ningún rencor con el Real Madrid porque además ahora estoy ante un reto maravilloso
¿Le ha sido sencillo reciclarse del Madrid a la selección?
Si hay una cualidad que deben tener los entrenadores, es la capacidad de adaptación allá donde les toque estar. El día a día del club del que vengo era muy exigente porque prácticamente no puedes pensar demasiado y tienes que actuar constantemente. Aquí el periodo de reflexión no te agobia y hay tiempo para planificar. En ese sentido, la Federación me está poniendo todas las facilidades del mundo para poder moverme por toda España. Ahora creo que tengo que tener dos miradas: una, la del corto plazo con las Ventanas, y otra la de largo plazo para implicar en un momento determinado a todos los jugadores de buen nivel que hay en Estados Unidos. Hay jugadores jóvenes que ahora mismo seguramente todavía no están maduros para competir al máximo nivel, pero que están empezando a dar sus primeros pasos en lugares donde la exigencia también es grande. Y por supuesto que con el Madrid ningún rencor.
Coger ahora la selección hay quien lo ve como un marrón...
Para mí es un orgullo y un honor. Desde muy pequeño he sido aficionado al baloncesto y luego profesional y no se puede considerar que esto sea un marrón en absoluto. Es un reto difícil, muy bonito y apasionante que asumo con determinación y con muchísimas ganas, con una ilusión tremenda. Eso es lo que quiero transmitir a los jugadores, la ilusión que yo tengo por por hacer las cosas bien y por traer un poquito de aire fresco para cambiar ciertas cosas.
¿Qué es lo que más valora de lo heredado y qué cambiaría?
El seleccionador anterior, por supuesto, ha hecho un trabajazo. Pero la Federación también lo viene haciendo hace años. Si algo quiero y puedo aportar es que ahora nos encontramos con muchos jugadores en Estados Unidos. Me gustaría estar muy cerca de todos, verles, tener contacto con ellos y estar en comunicación permanente como desde que me nombraron estoy haciendo. Habría que crear una red de colaboradores en Estados Unidos que nos puedan ayudar, un grupo de informantes que nos cuenten qué sucede allí. Ya de hecho la estamos formando y esa es una de las cosas que a mí me gustaría resaltar, que vamos a tener contacto directo con los más de 30 jugadores que tenemos allí. También quiero reforzar el hecho de que los jugadores me sientan como suyo, que puedan confiar en su seleccionador como alguien cercano.
Estar en el Mundial de Qatar 2027 debiera ser obligatorio...
No es obligatorio. Claro que nos gustaría. Nos gustaría estar ya clasificados, pero primero hay que andar un camino que empieza ahora. Es un reto bonito, pero yo creo que a nadie se le escapa que es difícil. El nivel del baloncesto español es bueno, pero el desafío es con un abanico de jugadores reducido. Esto no significa que los jugadores que vayan a ir no tengan nivel ni muchísimo menos. Eso es una cosa que siempre voy a dejar muy, muy clara. Van a ser jugadores de primerísimo nivel.
Lo de las Ventanas tiene algo de anomalía porque no poder llevar a los mejores jugadores...
Sí, pero cuando asumes una responsabilidad tienes que asumir también las reglas. Me gustaría que fuera de otra manera, pero... tenemos cuatro equipos en la Euroliga y es algo que no tienen otros. El Valencia, que ha sido el último en entrar, aportó cinco jugadores en el Eurobasket. Es una dificultad añadida, pero es lo que hay así que a mirar hacia delante.
Como exentrenador de clubes debe ser más que consciente de la dificultad en muchos momentos de apostar por los jóvenes...
Es un hándicap, pero es la realidad. Entiendo que los clubes defienden sus intereses y que en ocasiones tampoco es fácil para los entrenadores el dar oportunidades porque se juegan su puesto de trabajo. Por eso es tan meritorio por ejemplo lo de Sergio de Larrea en Valencia y su entrenador Pedro Martínez. No por darle oportunidades o simplemente por decir voy a poner un joven, sino porque este joven es muy bueno. Estuve en un Tenerife - Unicaja y había cinco jugadores españoles en pista. Eso no es fácil.
Resultado al margen, ¿qué conclusiones sacó del Eurobasket?
Una es que el jugador español tiene siempre colmillo competitivo y otra es que en ocasiones hay que dar tiempo al tiempo, a que las cosas maduren. Se pretende que haya jugadores que ejerzan de líderes por primera vez y para esa primera vez no siempre se está preparado, pero a lo mejor para la segunda sí. Y hay que dar segundas oportunidades porque siempre han sido muy buenos jugadores acompañados y rodeados de otros líderes. Ahora toca liderar a otros y la primera vez en ocasiones no siempre sale bien. Todo el mundo sabe de quién hablo...
çSi están en buena forma hay pocos que puedan representar a España mejor que los Hernangómez
Los Hernangómez...
Sí. Ellos por supuesto que van a seguir. Van a seguir tratando de liderar y de hacerlo lo mejor posible como no cabe duda que lo intentaron en su momento. Si están en buena forma y en buen nivel hay pocos que puedan representar a España mejor que ellos. Ahora, con esa espinita clavada, no va a haber nadie más motivado que ellos. Y otra conclusión fácil de sacar es que hay jóvenes que llaman a la puerta de una manera brusca y y queriendo derribarla.
Cuando habla de líderes y aprendizaje también surge el nombre de Santi Aldama...
Lo que pasó en el Europeo les va a venir muy bien a todos. Santi, Juancho y Willy tienen un compromiso exagerado con la selección y ahora con una responsabilidad de liderar que hasta este momento no habían tenido. Somos muy exigentes, pero a veces hay que dejar que los procesos maduren. Lo que ya me han demostrado cuando he hablado con ellos es que no dude nunca de que van a darlo todo por la selección.
¿No tiene la sensación de que Santi está en Memphis un tanto estancado y alejadísimo del que debe ser su rol en la selección?
Yo creo que un jugador debe estar donde le quieren y donde él quiere estar. Él se siente muy a gusto en Memphis. No sé si en algún momento cambiará de opinión, pero yo le veo progresar. Cada uno lleva un ritmo diferente. Santi ha sido un jugador joven en España al que ninguno de los grandes ha reclutado y él se ha ido allí a formarse. Vamos a dar tiempo al tiempo, vamos a tener la paciencia suficiente y vamos a dar cariño a nuestros jugadores que es lo primero que necesitan. Me consta que todo el mundo que rodea el baloncesto está deseando que salga bien las cosas y eso es un punto de partida magnífico. Aquí no hay «haters» de la selección y todo el mundo quiere que las cosas salgan bien.
No hay «haters», pero el mundo y las redes sociales no pueden estar más polarizadas...
Cuando reflexionas sobre eso llegas a la conclusión de que primero no puedes gustar a todo el mundo. Segundo, todo el mundo tiene una opinión y es respetable, pero hay que saber darle el valor que tiene. Uno en la vida tiene que aprender a escuchar a la gente que tiene cerca y en la que confía y en la que ve el día a día de tus cosas o de tu trabajo para poder opinar. La gente que opina por un rato, porque ha visto tres minutos de un partido y es capaz de lanzar una opinión tan alegremente que luego puede hacer daño si te afecta para mí no tiene mucho valor. Se trata de tener claro el orden de prioridades. Familia, amigos y poder hacer baloncesto mientras dure porque esto siempre tiene un principio y un final.
Otro líder: Santi Yusta, pieza clave en la próxima lista, es el máximo anotador de la ACB...
Para mí es una gran alegría porque además le conozco personalmente por haber coincidido en el pasado. Me alegra enormemente la barbaridad de inicio de temporada porque es un luchador que ha tenido que pelear mucho, que ambiciona mejorar cada día y con gran carácter competitivo.
Es una posibilidad que Ricky pueda volver a vestir la camiseta de España
¿Cómo valora la temporada de Ricky?
Está jugando increíblemente bien. Se le ve reír, disfrutar y jugar al nivel que se espera de su categoría. Me alegro enormemente que sea otra vez feliz jugando, que es lo que le gusta, no agobiándole. He mantenido conversaciones con él hace nada y entiendo que es una posibilidad que en un momento determinado él pueda volver a vestir la camiseta de España. Estando al nivel que está, que es un nivelazo, volverá cuando él lo decida.
El nivel del baloncesto español en cualquier caso no es el del resultado del Eurobasket...
El nivel que se tuvo en su momento fue altísimo porque se trabajó mucho, porque hubo una generación extraordinaria, porque los clubes trabajaron francamente bien, porque la Federación hizo un trabajo también muy bueno... pensar que ese nivel es fácil de mantener sería de ilusos, pero vamos a tener unas generaciones con las que tenemos que ser optimistas, con las que podemos ilusionarnos y ser ambiciosos.
Una de las últimas reflexiones de Sergio Scariolo es que en tres o cuatro años el equipo volverá a competir por todo...
No soy adivino, pero sí soy optimista porque veo que hay jugadores de mucho talento. De lo que se trata es de ser paciente y de trabajar día a día sin perder el foco. Ahora vienen unas Ventanas que para mí son lo máximo y nos pueden dar la posibilidad de acudir al Mundial, que será una experiencia que no nos podemos perder.
Uno de los que se ha ido a Estados Unidos es Ndiaye. ¿Puede darse un caso similar al de Garuba y que regrese antes de lo previsto?
Ojalá que en un momento determinado pueda jugar minutos, competir y eso le ayude a mejorar. Es verdad que podría ser un caso similar a lo que pudo pasar con Usman, pero ha habido veces que un jugador joven va a la G-League y al año siguiente forma parte del equipo de pleno derecho.
Otro que ha pasado por sus manos es Hugo González que ha enamorado a los Celtics...
Es un chico que trabaja francamente bien. La gente de Boston sabía perfectamente lo que quería y creo que cuando él salta la cancha también sabe lo que quiere Boston. Él demuestra su energía, su competitividad, no da un balón por perdido, defiende, rebotea, es capaz de anotar, tiene físico...
¿Le recuerda a Rudy?
Pues además era con quien tenía muy buena relación en los entrenamientos y en cuanto a escuchar sus enseñanzas. Es un jugador total al que hay que darle también su tiempo, pero es que en Boston sabían muy bien a quién fichaban. Cuando lo eligieron fue la noche que ganamos la ACB en Valencia y él pensaba que podía estar más arriba, pero luego se llevó un alegrón porque él sabía que iba a un sitio donde se le iba a considerar.
¿Qué reto considera que es más complicado: el que afrontó con el Madrid o la selección?
Son diferentes. Mantener el nivel de competitividad y de títulos que tuvo Pablo Laso en el Real Madrid era muy difícil. Creo que se hizo bien. Ahora toca mantener un nivel de competitividad con la selección como el que ha tenido con Sergio, con Pepu, con Aíto, con Lolo, con Antonio Díaz-Miguel...
[[DEST:L|||Sergio es muy metódico, muy trabajador, muy estructurado a la hora de hacer todo. Pablo tiene un carácter un poco más intuitivo
Con los dos entrenadores con los que ha compartido más tiempo han sido Laso y Scariolo. ¿Qué destaca de ambos?
Sergio es muy metódico, muy trabajador, muy estructurado a la hora de hacer todo. Trata de tener controlado todo lo que puede. Pablo es un poco más intuitivo y un poco más de dejar de vez en cuando que la inspiración aparezca. Y luego tiene una capacidad también de generar una buena armonía dentro de lo que es el grupo, que también es envidiable. Se trata de aprender y de saber qué no tienes que aprender también.
¿Cuál es el mejor jugador al que ha entrenado?
Bueno, como ayudante estuve al lado de Luka Doncic. Pero para mi Edy Tavares, porque ha sido uno de los de los jugadores a los que más cariño he cogido. Por lo buena persona que es y por el «feeling» que he tenido siempre con él a la hora de hablarnos de una manera muy sincera. Y si es uno español, pues sin duda sería Llull. Le tengo un cariño especial y siempre rema a favor del colectivo.
¿Tiene tiempo para seguir jugando al ajedrez?
Juego mucho con el móvil. Ahora en los viajes aprovecho y juego de vez en cuando, pero he bajado muchísimo mi nivel.
¿Se puede trasladar algo del ajedrez al baloncesto?
Sin duda. El protagonista del juego son los jugadores, pero el entrenador debe mover sus piezas, aportar soluciones a problemas que ellos quieren resolver y en ocasiones no son capaces. El entrenador tiene mucho que decir dentro del tablero que es la cancha. Hay que tener varios planes... al liderar un proyecto tienes que saber por dónde van a ir las cosas o anticiparte a lo que pueda pasar.
Como amante de la cerveza que es, ¿con cuál brindaría por la victoria ante Dinamarca?
Hay dos que son mi pasión. El tercio de Mahou fresquito y luego una Alhambra verde 1925... pero no pongo pegas. Son pequeños placeres y que siempre me ha gustado celebrar tras los partidos. En casa tengo un grifo y tener gente en casa, estar con amigos... es una de las cosas que más me gusta.
Volviendo a Laso y Scariolo, ambos han ejercido o ejercen de comentaristas. ¿Se ve ahí?
No creo que dé mucho juego. Yo no soy un tío muy divertido, digámoslo así a la hora de comentar. No es una de mis virtudes así que creo que ese canal perdería mucha audiencia. Pero nunca se sabe.
¿Se considera una persona introvertida?
Quizá. No me gusta estar permanentemente expuesto, pero tampoco lo rehúyo. Entiendo que es parte del trabajo y ya está. Entiendo que cuando asumes una responsabilidad tienes que que dar explicaciones a la gente.