Belgrado

El valor de una medalla

Calderón y Mumbrú, en la conferencia de prensa que ofrecieron ayer en Liubliana
Calderón y Mumbrú, en la conferencia de prensa que ofrecieron ayer en Liublianalarazon

El último Eurobasket en que España se quedó fuera del podio fue en Belgrado 2005. Allí tampoco estuvo Pau Gasol y allí fue Francia la que derrotó a la Selección en la pelea por la medalla de bronce con una derrota tanto o más dolorosa que la del viernes en semifinales. El rival de hoy es Croacia, la primera selección que sufrió la mejor defensa del campeonato allá por el lejano 4 de septiembre. Los balcánicos cayeron por 28 (68-40) y, al margen de aquel resultado, España es más que favorita en el penúltimo partido de un torneo que no pasará a la historia por su calidad.

En la Selección, después de la derrota en semifinales, hay quien considera que al grupo no se le valora del todo. Más de uno piensa que desde fuera al bronce no se le otorga ningún valor y por eso están empeñados en reivindicarse después de un campeonato marcado por las derrotas en los finales igualados. «Después de caer ante Francia todos acabamos más tocados de la cuenta, pero es lo que pasa cuando un grupo ganador pierde. Hace años, luchar por una medalla era un éxito y ahora parece que no», lamentó una de las piezas clave del vestuario español.

Calderón ratificó la opinión de su compañero. «El bronce ahora igual sabe a poco, pero en unos años se apreciará su valor. Igual es que estamos malacostumbrados a ganar siempre, y algún día tenía que llegar la derrota. Lo más positivo es que tenemos un partido para ganar una medalla y eso es algo que alguna gente no consigue nunca».

En Croacia muy pocos esperaban alcanzar la última jornada del Eurobasket con la posibilidad de pelear por una medalla. Los balcánicos llegaron con la meta de lograr una plaza para el Mundial del año que viene y han cumplido con creces. Si ganasen el bronce, como asegura Calderón, tendría «casi más valor que el oro para nosotros». Los croatas no suben el podio desde 1995. Repesa ha logrado que el equipo olvidase la humillante derrota ante España del estreno y desde entonces hasta las semifinales ante Lituania todo fueron victorias. Bogdanovic, Tomic, Draper, Ukic... Los croatas por primera vez en mucho tiempo se han comportado como un verdadero equipo y eso les ha convertido en el mejor combinado de los países balcánicos.

En la Selección y en el seno de la Federación nadie se plantea la posibilidad de una derrota ante los croatas. Terminar con la quinta derrota en once partidos obligaría a replantear quizá más de un supuesto que se da por hecho –la continuidad de Orenga en el banquillo– para el Mundial. Por eso, el propio seleccionador hacía esta reflexión: « Nuestro objetivo era el máximo y ahora no va a poder ser, pero queremos la medalla de bronce para el equipo, el grupo, la Federación y el deporte español. La gente se dejará la piel». Orenga sueña con un final igualado para hacer olvidar los cuatro tropiezos en otros tantos finales apretados: «Si ganamos por veinte, perfecto, pero si llegamos a un final igualado seguro que llegaremos con una solución. Ya nos toca ganar un final apretado. Debemos ser capaces de endurecer el partido hasta que nos favorezca». El bronce significaría el sexto metal (dos oros, dos platas y un bronce) de España en los últimos siete Campeonatos de Europa.